Washington otorga “excepción humanitaria”
El Departamento del Tesoro de EEUU excluye de sus medidas ilegales de terrorismo económico, durante 180 días, solo las transacciones de ayuda para Siria, en el marco de la asistencia humanitaria por el terremoto.
Con motivo de las necesidades humanitarias surgidas por el terremoto, la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro de EEUU (OFAC – por su sigla en inglés) emitió la Licencia General Nº 23 (GL23 ), una decisión que brinda excepción de sus medidas coercitivas unilaterales impuestas a Siria y su pueblo.
La medida, fechada el 9 de febrero y habilitada durante 180 días, tiene como fecha límite el 8 de agosto de 2023 y permite las transacciones financieras relacionadas con el alivio del terremoto a Siria, como una “excepción especial” de lo regulado por las llamadas Regulaciones de las Sanciones Sirias (SySR).
El Ministerio consideró que esta licencia brinda el amplio mandato necesario para apoyar los esfuerzos de socorro inmediato en casos de desastres en Siria e incluye permitir el procesamiento y transferencia de fondos en nombre de personas de otros países hacia o desde Siria para respaldar las transacciones autorizadas bajo esta licencia general.
El terrorismo económico pretende mostrar una cara humanitaria
“Nuestro más sentido pésame al pueblo de Turquía y Siria por la trágica pérdida de vidas y la destrucción a raíz de los devastadores terremotos”, dijo el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo.
“A medida que los aliados internacionales y los socios humanitarios se movilizan para ayudar a los afectados, quiero dejar muy claro que las sanciones de Estados Unidos en Siria no se interpondrán en el camino de los esfuerzos para salvar vidas del pueblo sirio. Si bien los programas de sanciones de EEUU ya contienen exenciones sólidas para los esfuerzos humanitarios, hoy el Tesoro está emitiendo una Licencia General para autorizar los esfuerzos de socorro en caso de terremoto para que quienes brindan asistencia puedan concentrarse en lo que más se necesita: salvar vidas y reconstruir”, afirmó .
Mientras nos secamos las lágrimas ante semejante desborde de humanitarismo, resulta esencial recordar que:
Las históricas medidas coercitivas unilaterales estadounidenses, que datan de la década de 1980, se han visto reforzadas -tras la derrota del proyecto terrorista bélico en 2018 con la recuperación del 80% del territorio nacional por parte del Ejército Árabe Sirio- a partir de 2019, con la llamada “Ley Cesar ” que reforzó el cerco económico a la República Árabe Siria, causando sufrimiento al pueblo sirio, ya que sus efectos se sienten sobre todos los aspectos de la vida y los sectores vitales y de servicios en el país.
A esto debe sumarse la ocupación ilegal de territorio sirio (desde 2018) y el saqueo regular e ininterrumpido de sus recursos petroleros desde las plantas ubicadas en el este del país que representan entre el 70 y 80% de las fuentes de crudo sirias.
Es en este marco desestabilizador por la vía económica, en el que el Estado Sirio y su valiente y sufrido pueblo, han tenido que enfrentar la reciente tragedia del terremoto del pasado lunes 6 de febrero.
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