Novedoso candidato admirador de genocidas
Sumamente preocupados, muchos argentinos nos encontraremos este domingo con un candidato a presidente que, entre otros logros en plena campaña, ha ondeado públicamente una bandera extranjera y ha exaltado la figura de la gran asesina de nuestros soldados en Malvinas, Margaret Thatcher. La preocupación es doble para los argentino-árabes al ver de qué bandera se trata.
Ante la llegada, en pocos días, de la instancia final y decisiva en ballotage para la justa electoral presidencial 2023, como argentinos no puede menos que preocuparnos e irritarnos la manifiesta doble-lealtad (o tal vez única) de un candidato a presidente que se muestra en público ondeando fervorosamente una bandera que no es la nacional. Doblemente preocupante e indignante resulta dicha situación para los descendientes de árabes sirio-libaneses, al ver de qué bandera se trata.
pic.twitter.com/KfWOLYZURx— GABRIEL TAYLOR (@vict0camp0) November 15, 2023Increíble, en un acto proselitista, el candidato de LLA enarbola la bandera de OTRO PAÍS como campaña.
Mientras el régimen genocida israelí, ocupante de Palestina, se encuentra hace 40 días en plena faena criminal bombardeando a los civiles palestinos cercados en la Franja de Gaza, con un saldo ya de más de 11.500 muertos de los que el 70% son niños, mujeres y ancianos; en nuestra amada República Argentina, las noticias del genocidio que suelen ser ocultadas por regla general en los medios masivos y hegemónicos, hoy lo son en mayor grado, dado que la justa electoral nacional absorbe, como es natural, la mayoría de la agenda informativa.
Es así como los argentinos hemos visto a uno de los candidatos que será parte del menú bipartito del domingo próximo, incluyendo en sus propuestas de gobierno, especialmente en materia de política exterior, claros elementos provenientes de una agenda extranjera ajena a los intereses nacionales; es decir, la agenda de un movimiento político genocida extranjero, como es el sionismo fanático, exclusivista, opresor y fascista que encabeza el proyecto de ocupación total de Palestina (y el resto del Creciente Fértil, tierra de nuestros ancestros).
Lo dicho, configura ciertamente algo nunca antes visto en forma tan abierta y descarada en la historia argentina, y pocas veces en la historia mundial, en casos como la triste experiencia de años recientes en la hermana República Federativa de Brasil con la llegada al poder de Jair Bolsonaro.
Conciencia nacional
En dicho marco y a modo de excepción a nuestra tradición de dedicarnos exclusivamente al Cercano Oriente en relación a la política como tópico de nuestra tarea informativa cotidiana, la plena convicción en una profunda conciencia patriótica argentina nos conmina a expresarnos sobre el presente contexto político nacional, como Argentinos leales a nuestra Patria y descendientes de árabes con una herencia de apoyo a supremos valores como la justicia, el derecho internacional y los derechos soberanos de los pueblos.
Y cuando hablamos de pueblos, también hablamos de países del mundo, en el marco de un sistema internacional que si bien dista mucho actualmente de funcionar como debiera, ya que está tristemente signado por el doble rasero y algo muy parecido a “la ley de la selva”, sin embargo, sigue siendo por lo pronto, el único sistema que tenemos como Humanidad organizada en más de 190 estados del globo.
Resulta entonces esencial aquí separar la paja del trigo y marcar claramente por un lado, a quienes tal como los países árabes han demostrado constantemente ser verdaderos socios y amigos de la Argentina especialmente en su principal reclamo histórico soberano; de quienes, por el contrario, a lo largo de la historia se han expresado siempre en forma inequívoca, por ejemplo, en el ámbito de la Comisión Política Especial y de Descolonización (Cuarta Comisión) de la Asamblea General ONU, apoyando el proyecto colonial del usurpador británico de nuestras eternas Islas Malvinas.
Dejando claro que no se trata aquí de hacer un llamado a votar por tal o cual candidato, resulta evidente sin embargo, que sin necesidad de ahondar en otros tantos puntos (casualmente la privatización del Mar Argentino , uno de ellos), de la díscola performance exhibida por el vehemente candidato, presentado como “novedoso” y “rara avis ” en la política argentina, lo mencionado es más que suficiente para expresar claramente nuestro rotundo rechazo a habilitar el acceso al Sillón de Rivadavia en favor del Sr. Javier Milei, un manifiesto impulsor de agendas extranjeras ajenas al interés del pueblo argentino y un admirador confeso de los genocidas y criminales de guerra de ayer y hoy .
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