OMS advierte sobre la crisis sanitaria en Gaza

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha manifestado su alarma ante la escalada de violencia en Gaza, exacerbada por la acción bélica genocida de la ocupación israelí. En una conferencia de prensa virtual, la Dra. Hanan Balkhy, directora regional de la OMS, describió la situación como "una crisis humanitaria en plena evolución" y resaltó la urgente necesidad de un cese al fuego para permitir la asistencia sanitaria.

"Los ataques indiscriminados están destrozando la infraestructura esencial y dejando a la población civil en un estado de desesperación absoluta," afirmó la Dra. Balkhy.

En las últimas semanas, Gaza ha registrado la detección de poliovirus tipo 2 en muestras de aguas residuales, lo que, junto con los ataques militares, pone en grave riesgo a los niños de la región. A pesar de los desafíos logísticos y de seguridad , la OMS se prepara para iniciar una serie de campañas de vacunación, en colaboración con el Ministerio de Salud de Gaza y UNICEF.

"Para llevar a cabo estas campañas, necesitamos un alto el fuego, incluso temporal," enfatizó Balkhy. "Sin la paz necesaria, la amenaza de la poliomielitis podría extenderse aún más allá de las fronteras de Gaza", agregó.

El Dr. Rik Peeperkorn, representante de la OMS en el territorio palestino ocupado, añadió que la organización ya ha comenzado la planificación para estas campañas de vacunación masiva, que incluirán la movilización de equipos médicos y la distribución de vacunas bajo estrictas condiciones de almacenamiento.

Además, la OMS ha desplegado expertos en emergencias y suministros vitales para apoyar al Ministerio de Salud del Líbano y ha reforzado la capacidad de hospitales en Siria, Irán y Jordania para enfrentar posibles situaciones de emergencia.

"La situación es crítica y requiere una respuesta internacional coordinada y urgente", concluyó la Dra. Balkhy, instando a la comunidad internacional a intervenir para detener la violencia y facilitar la entrega de ayuda humanitaria.

En medio de la creciente tensión regional, la OMS subraya la necesidad imperativa de proteger a los civiles y garantizar el acceso a la atención médica, destacando que la salud y la seguridad de miles de personas están en juego.