Conversando con dirigentes: Adalberto Assad

Propendiendo a efectuar un aporte al diálogo, el Diario Sirio Libanés ha presentado una misma y esencial temática a un conjunto de nuestros dirigentes de todo el país, a los efectos de difundir sus pensamientos y fomentar el sano y constructivo intercambio.

En esta oportunidad nos encontramos con Adalberto Assad, Presidente de Fearab Argentina, y de la Asociación Árabe Argentina Islámica, de la Ciudad de Buenos Aires.

Entrevista

1)  ¿Cómo considera que ha funcionado la dirigencia de la institución en estos últimos años, sobre todo a partir del inicio de la crisis en Siria?

Ante todo lamentamos como descendientes de árabes, tanto sirios como libaneses, estos acontecimientos que se han producido en la República Árabe Siria. Nosotros, desde la colectividad hemos presenciado una fractura en nuestro pensamiento, dado que han surgido aquellos a favor y aquellos en contra del gobierno sirio.

Esa diferencia, producida originalmente en Siria, se ha trasladado acá, pero en lugar de servir para encontrar un consenso y un criterio unificado, sirvió para dividir más a la colectividad, sin darse cuenta de la gravedad de lo que está pasando allá.

Nosotros como colectividad argentino árabe, debemos bregar por la paz como principio, y por la unión del pueblo sirio, en coordinación con el gobierno sirio, elegido democráticamente como lo han hecho. Hay que tener presente que más allá de cualquier enfrentamiento o postura, el que sufre es el pueblo. Hoy vemos criaturas, familias, que salen de su país en busca de refugio internacional, sufriendo por su país y por la propia y difícil situación.

Y acá lo que sucedió es que el pensamiento personal en algunos casos se trasladó a lo institucional. A mí me dolía mucho ver frente a la Embajada de Siria, manifestarse a dos grupos, en dos veredas distintas, cuando el conflicto tiene a Siria luchando por su subsistencia frente a un conjunto de mercenarios de más de 80 nacionalidades.

Eso es lo que no entiendo. ¿Qué es lo que nos ha pasado como colectividad? ¿Qué idea nos ha penetrado para que actuemos así? Entonces, si aplico el sentido común digo, hermano sentémonos juntos a dialogar que es lo que está pasando y en que podemos colaborar. Pero desgraciadamente las instituciones como política institucional han aplicado ese mismo sentido y así estamos, lamentablemente con una colectividad desarticulada, no solamente en lo local sino también a nivel nacional. Estoy hablando de Fearab por supuesto.

2)  ¿Cómo percibe actualmente la cohesión interna y la representatividad externa de la colectividad?

Bueno, la representatividad de la colectividad debe trabajarse buscando insertarse, dentro de los organismos tanto oficiales como no oficiales, sea cual sea el color del gobierno, porque la colectividad árabe está por encima de las ideologías.

Entonces, nosotros como argentinos descendientes de árabes, debemos aceptar lo que el gobierno de turno haya implementado en las temáticas que nos tocan.

Por ejemplo, en el caso del Programa Siria iniciado en 2014, durante el gobierno de Cristina, y hoy incrementado y continuado con Macri,  a través del proyecto de ingresar al país, Dios mediante, 3000 sirios de acá a 1 o 2 años. 

En ese tema, hemos venido teniendo reuniones con funcionarios para tratar de acoplar el pensamiento de la colectividad con los organismos que nos representan oficialmente, como Cancillería, Migraciones, el Inadi, y otros entes como la AFI, el Ministerio de Seguridad o la Secretaría de Derechos Humanos.

Estamos teniendo reuniones, y yo manifiesto en todas, que es lo que queremos como colectividad. Nosotros estamos a disposición de los refugiados hermanos sirios que ingresen al país, para darles toda la contención posible desde nuestras instituciones, pero dentro de los recursos logísticos de los que disponemos, pero es indispensable el control solido por parte del gobierno de todas las normas de seguridad referidas al ingreso.

Sin duda, hay cosas que escapan a nuestro alcance, porque si el gobierno nacional no dispone de financiamiento internacional para llevar adelante esta política, si bien seguirá apoyando el plan no lo va a poder implementar de la forma ideal.

Hoy el gobierno y Cancillería quieren traer a los sirios pero el Ministerio del Interior y organismos de seguridad están un poco reacios, entre ellos aún no han conciliado pensamientos. Pero mientras tanto, existen formas institucionales de colaborar, como cuando estuvo el caso de la chica siria Haneen Nasser.

A esta chica joven, estudiosa, traductora de idiomas, hace un año la querían traer, pero tenía un problema por el cual la habían hecho dar vueltas con su trámite y había tenido que devolver 2 veces el pasaje, tenían todo presentado acá en Cancillería, en la Embajada Argentina en Líbano, pero me puse a disposición y vi cual era el problema. Le faltaba todavía un trámite importante que es la entrevista que realiza la AFI, en Líbano, para darle el visto bueno final, algo que mediante nuestra gestión en Migraciones, se hizo finalmente y ya pudo llegar al país.

Que quiero decir con esto, que lo que debemos hacer es despojarnos de mezquindades, de banderías políticas partidarias, como hemos visto por las redes sociales. Esto es indignante, hemos bajado los niveles y estamos nivelando para abajo y no para arriba.

Esto indigna de algunos dirigentes, que no entienden que para insertarse y trabajar por una colectividad rica, se debe entender de política, nos guste o no.

Este es mi pensamiento, estoy trabajando con mi humilde estilo y trayectoria, en pos de llegar y conseguir los objetivos y estoy seguro que los vamos a conseguir, porque te escuchan y te van abriendo puertas, de hecho el mismo gobierno necesita de nosotros, como una parte indivisible del tejido social nacional,  y nosotros tenemos que estar a la altura de las circunstancias, pero sin divisiones, fracturas ni confrontaciones.

Es esencial recuperar el trabajo orgánico e institucional de jerarquía.

3)  ¿Considera necesaria una reactivación de FEARAB? ¿Cuáles son los pasos a seguir?

Sin duda. Creo que habría que refundar Fearab con el compromiso de todas las provincias y filiales. Nosotros por ejemplo sentimos algarabía cuando elegimos la comisión directiva, sentimos el acompañamiento, y después vimos una dejadez, una desidia, un abandono y falta de compromiso.

Es esencial ir por la causa, y no por el cargo. La mezquindad, y el ego en el ser humano, son el conflicto interno más grande, como bien sabemos, y ese es el problema que tenemos, protagonismos personales, ego y falta de humildad. El día que asumamos que tenemos una causa por delante, que va más allá de los cargos, quizás nos reestructuremos y podamos conseguir un futuro mejor, con espíritu de unión, compromiso auténtico, estructuras inteligentes y distribución de tareas.

Y con respecto a Fearab puntualmente, vamos a armar una reunión importante para fijar una asamblea y que nos escuchemos entre todos, para lo cual voy a pedir espíritu democrático, mucho respeto y no percibir diferencias de ningún tinte (especialmente religioso), solo entrega y compromiso sincero de los dirigentes participantes.