Tras el asesinato de Qaddafi se enviaron armas a Siria vía al-Qaeda, Qatar y EEUU

Si bien EEUU sigue negando el apoyo a los terroristas en Siria en términos de dinero, entrenamiento o armas, cuando los "rebeldes" no eran (en un principio) "moderados", la verdad es que se ha demostrado una y otra vez que los Estados Unidos en efecto armaron a los yihadistas en Siria desde el principio e incluso antes de que las supuestas "protestas" comenzaran en 2011.

Incluso sacando de la ecuación el armado de terroristas admitido en 2013 (la infame iniciativa que tuvo lugar después que la administración de Obama inventara una acusación contra el gobierno sirio por el uso de "armas químicas" contra civiles en Ghouta ese año), la evidencia es clara: los EEUU habían estado armando combatientes antes de ese momento.

Esto se ve con claridad al seguir el rastro de las armas que encontraron su camino hacia Siria desde el principio.

Por ejemplo, solo hay que echar un vistazo al artículo de CJ Chivers, Eric Schmitt y Mark Mazetti, publicado en The New York Times en 2013 y titulado, "In Turnabout, Syria Rebels Get Libyan Weapons" (en un giro, rebeldes sirios obtienen armas libias).

En este artículo, los autores intentan retratar una red de milicias sirias y libias que cooperan entre sí para saquear las tiendas militares de Qaddafi para apoyarse entre sí en una guerra ideológica contra gobiernos seculares (pero lo hacen también de alguna forma al servicio de la democracia). Qatar también está considerado como uno de los culpables en la historia.

Sin embargo, lo que también está expuesto, aunque de manera no intencional, es el hecho de que el mismo EEEUU estaba iniciando y facilitando estas transferencias.

Primero, los escritores pintan el cuadro de una red internacional, que se admite financiada por Qatar y facilitada por Turquía, entre las milicias libias y sirias, con los combatientes libios enviando las armas que "no necesitaban" a sus homólogos sirios. El artículo reza,

La evidencia reunida en Siria, junto con los datos de control de vuelo y las entrevistas con miembros de la milicia, contrabandistas, rebeldes, analistas y funcionarios en varios países, ofrece el perfil de un complejo y activo esfuerzo multinacional, financiado en gran parte por Qatar, para transportar armas desde Libia hasta los combatientes de la oposición siria. Los ex combatientes de Libia, que simpatizan con los rebeldes de Siria, han sido colaboradores entusiastas.

"Es solo el entusiasmo del pueblo libio que ayuda a los sirios", dijo Fawzi Bukatef, ex líder de una alianza de brigadas libias que recientemente fue nombrado embajador en Uganda, en una entrevista en Trípoli.

A medida que EEUU y sus aliados occidentales avanzan hacia la provisión de ayuda letal para los rebeldes sirios, estas transferencias secretas permiten conocer un conducto de armas no registrado que es difícil de monitorear o controlar. Y mientras el sistema parece tener éxito en mover brazos a través de múltiples fronteras y seleccionar grupos rebeldes, una vez dentro de Siria, el flujo se ramifica. Los combatientes extremistas, algunos de ellos alineados con al-Qaeda, tienen el dinero para comprar el stock recién llegado, y muchos rebeldes están dispuestos a vender.

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Esas armas, que se escaparon de la custodia del Estado cuando el pueblo del Coronel Qaddafi se levantó contra él en 2011, se envían en barcos o vuelos de la Fuerza Aérea de Qatar a una red de agencias de inteligencia y líderes de la oposición siria en Turquía. Desde allí, los sirios distribuyen las armas según sus propias fórmulas y preferencias a grupos de combate particulares, que a su vez los entregan a sus combatientes en el terreno, dijeron rebeldes y activistas.

Tenga en cuenta que los "rebeldes" y "activistas" que se citan son terroristas que luchan contra el gobierno sirio o que acaban de derrotar al de Qaddafi. Aun así, se admite el hecho de que la red de intercambio de armas de las milicias fue en gran parte un concepto de una monarquía feudal del Golfo (Qatar).

El artículo continúa,

El avión de carga qatari C-17 hizo al menos tres paradas en Libia este año, incluidos los vuelos desde el aeropuerto Mitiga en Trípoli el 15 de enero y el 1 de febrero, y otro que salió de Benghazi el 16 de abril, según los datos de vuelo proporcionados por un oficial de aviación en la región. Los aviones regresaron a la base aérea de Al Udeid en Qatar. La carga fue luego llevada a Ankara, Turquía, junto con otras armas y equipos que los qataríes habían estado reuniendo para los rebeldes, dijeron funcionarios y rebeldes.

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Los movimientos de Libia complementan el puente aéreo que ha utilizado diversos aviones de carga militares saudíes, jordanos y qataríes para canalizar equipo y armas militares, incluso desde Croacia, hasta los ultra-armados rebeldes. El viernes, funcionarios de la oposición siria dijeron que los rebeldes habían recibido un nuevo envío de armas antitanques y otras, aunque dan cuenta de variadas fuentes de las armas recientemente recibidas. La Agencia Central de Inteligencia (CIA) ya ha desempeñado al menos un papel de apoyo, dicen los funcionarios.

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Un antiguo miembro de la administración Obama, familiarizado con las transferencias, dijo que el gobierno de Qatar estableció relaciones con las milicias libias en 2011 cuando, según el informe de un Panel de Expertos de las Naciones Unidas, enviaba armas a las fuerzas rebeldes allí, en violación a la Resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU.

Como resultado, los qataríes pueden recurrir a su influencia con las milicias de Libia para apoyar a sus beneficiarios actuales en Siria. "No es tan complicado", dijo el ex funcionario. "Lo estamos viendo. Los libios tienen una cantidad increíble de material".

Los activistas sirios y los funcionarios occidentales dicen que al igual que las transferencias de armas no registradas organizadas por otros estados árabes, los envíos desde Libia han sido muy grandes, pero no se han mantenido al día con los enormes gastos diarios de municiones de los rebeldes.

Y la mayoría de las armas han sido relativamente ligeras, incluidos rifles, ametralladoras, granadas propulsadas por cohetes, municiones para armas pequeñas y proyectiles de mortero.

Pero la afluencia de Libia parece dar cuenta de al menos una parte de las armas antitanques vistas en el conflicto esta primavera, incluidos los proyectiles de fabricación belga para rifles sin retroceso M40 y algunos de los misiles guiados Konkurs-M de fabricación rusa que han estado destruyendo tanques sirios en meses recientes.

Pero las armas tomadas del stock de Ghaddafi no eran suficientes. Lo que faltaba en el suministro, sin embargo, pronto se recuperó a través del apoyo directo estadounidense. Sin embargo, téngase en cuenta que el informe establece que las transferencias de armas se realizaron con la CIA desempeñando "al menos un papel de apoyo".

Benghazi

Si bien muchos rumores, acusaciones y escándalos rodean el incidente de 2013 en Benghazi, donde un conjunto diplomático estadounidense y el Embajador Chris Stevens fueron asesinados por extremistas islámicos, surge la pregunta "¿Cuánto se sabía sobre la misión de apoyo de Stevens a los terroristas en Siria y quién lo sabía?

Si bien la discusión sobre cómo fue asesinado Stevens, o si alguien sabía lo que le iba a pasar está fuera del alcance de este artículo, vale la pena preguntar de si se sabía o no que Stevens funcionaba esencialmente como un conducto entre los terroristas en Libia y los de Siria, así como un facilitador de armas para esos terroristas.

De hecho, es importante tener en cuenta que los documentos obtenidos por Judicial Watch del Departamento de Defensa y del Departamento de Estado revelan que tanto la administración de Obama como el Departamento de Estado, es decir, la Secretaria de Estado Hillary Clinton, eran muy conscientes del hecho de que las armas estaban siendo enviadas a terroristas en Siria a través de Benghazi, Libia.

Uno de los documentos que se obtuvieron del Departamento de Defensa, más específicamente de la Agencia de Inteligencia de Defensa, fue fechado en octubre de 2012 y afirmó claramente que no solo se enviaban armas a Siria sino que los envíos en sí estaban siendo monitoreados.

De acuerdo a los documentos ,

Las armas de las antiguas reservas militares de Libia fueron enviadas desde el puerto de Benghazi, Libia, hasta el puerto de Banias y el puerto de Borj Islam, Siria. Las armas enviadas a fines de agosto de 2012 fueron rifles de francotirador, granadas propulsadas por cohete (RPGs) y misiles de 125 mm y 155 mm.

Inmediatamente después y tras la incertidumbre causada por la caída del régimen (de Qaddafi) en octubre de 2011 y hasta principios de septiembre de 2012, las armas de las antiguas reservas militares de Libia ubicadas en Benghazi, se enviaron desde el Puerto de Benghazi, Libia a los puertos de Banias y el Puerto de Borj Islam, Siria. Los puertos sirios fueron elegidos debido a la pequeña cantidad de tráfico de carga que transita por estos dos puertos. Los barcos utilizados para transportar las armas eran de tamaño mediano y podían albergar 10 o menos contenedores de carga.

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Las armas enviadas desde Siria a fines de agosto de 2012 fueron rifles de francotirador, granadas propulsadas por cohete (RPGs) y misiles de 125 mm y 155 mm. Los números para cada arma se estimaron en: 500 rifles de francotirador, 100 lanzadores de RPG con 300 rondas totales y aproximadamente 400 misiles de obuses [200 ea - 125 mm y 200ea - 155 mm.]

Si bien ya en 2018, estos documentos no se pueden considerar como una bomba mediática, muchos investigadores y escritores alternativos fueron condenados como teóricos de la conspiración en 2012 por sugerir que el Departamento de Estado y el gobierno de Obama fueron cómplices y facilitaron el armado de terroristas en Siria.

Además, los documentos son una contradicción directa con el testimonio de una serie de funcionarios estadounidenses, incluida la propia Hillary Clinton, quien afirmó en un testimonio público bajo juramento que EEUU no tuvo ningún papel en el armado y apoyo de los "rebeldes" sirios desde el inicio de la crisis.

Por ejemplo, la propia Clinton afirmó que no tenía conocimiento de ningún programa de este tipo cuando fue interrogada por el senador Rand Paul en una audiencia del Congreso en 2013. El intercambio fue el siguiente:

R. Paul: Ha sido expuesto en informes de noticias que los barcos han estado saliendo de Libia y podrían tener armas. Lo que me gustaría saber es el anexo que estaba cerca [en Benghazi]. ¿Estaban involucrados en la adquisición, compra, venta, obtención de armas, y se transfirió alguna de estas armas a otros países, a cualquier país, incluida Turquía?

H. Clinton: Senador, tendrá que dirigir esa pregunta a la agencia que publicó el anexo. Veré qué información está disponible.

R. Paul: Está diciendo que ud. no lo sabe.

H. Clinton: No lo sé hago. No tengo ninguna información sobre eso.

Si bien el documento no especificaba que EEUU era la parte responsable con respecto a la organización de los envíos de armas o que tenía un papel directo para facilitarlos (léase la parte responsable), deja claro que EEUU estaba al tanto de lo que sucedía y estaba supervisando estos envíos.

Como mínimo, esto prueba que el testimonio de Clinton es falso; y en el peor de los casos, se suma a la cantidad de evidencia de que Estados Unidos no fue solo una parte, sino más bien el arquitecto de la crisis siria desde el primer día.

Antes de Benghazi

Con respecto a Libia , fue bien sabido e incluso criticado por los funcionarios libios que el Departamento de Estado de Clinton estaba canalizando activamente el armamento a los "rebeldes" con "vínculos con al-Qaeda".

Por supuesto, los "rebeldes" en realidad eran al-Qaeda, tanto como la propia "rebelión" libia en sí misma, que no era más que el uso de fuerzas proxy (agentes) por parte de EEUU y la OTAN, y cuyas filas estaban formadas por terroristas, yihadistas y mercenarios. Como informó The Washington Times en febrero de 2015:

Los funcionarios libios estaban profundamente preocupados en 2011, cuando la secretaria de Estado Hillary Rodham Clinton estaba tratando de sacar a Moammar Qaddafi del poder, de que las armas estaban siendo canalizadas a los rebeldes respaldados por la OTAN que tenían vínculos con al-Qaeda, temiendo que los insurgentes bien armados pudieran crear un refugio para terroristas, según informes de inteligencia secretos obtenidos por The Washington Times.

Los informes incluían una lista de armas de 16 páginas que los libios supuestamente rastreaban a los rebeldes de fuentes occidentales o sus aliados en la región. Los memos fueron corroborados por un activo de inteligencia de los Estados Unidos familiarizado con los documentos, así como por el ex alto funcionario del régimen de Qaddafi, Mohammed Ismael.

"La OTAN ha dado permiso a varios aviones cargados con armas para aterrizar en el aeropuerto de Benghazi y en algunos aeropuertos tunecinos", dijo el informe de inteligencia, identificando grandes cúmulos de armas, incluidos tanques y misiles tierra-aire.

Ese informe, que se preparó en inglés para que un activo de inteligencia estadounidense pudiera pasarlo a los miembros clave del Congreso, identificó envíos aéreos y marítimos específicos -observados por la inteligencia libia- que transportaban armas a los rebeldes que intentaban destituir al régimen de Gadhafi.

"Hay un vínculo estrecho entre al-Qaeda, las organizaciones jihadistas y la oposición en Libia", advirtió el informe.

Elliot Jager de Newsmax también señala la traición de Clinton en la financiación y el apoyo de los yihadistas en Libia cuando escribe que Clinton fue una de los principales funcionarios que promovieron la idea de apoyar a los terroristas en el país africano. Jager declara,

Moammar Qaddafi, el dictador libio derrocado en 2011 por rebeldes respaldados por la OTAN, proporcionó información importante que condujo a los asesinatos de agentes clave de al-Qaeda e interrumpió ataques terroristas planeados contra intereses estadounidenses, confirmó a The Washington Times el ex asesor de Qaddafi Mohammed Ismael.

Luego, la secretaria de Estado Hillary Clinton se convirtió en la principal impulsora de la decisión del gobierno de Obama de respaldar a los insurgentes anti-Qaddafi, informó el New York Times en 2011.

Clinton, junto con Samantha Power, en ese entonces en el Consejo de Seguridad Nacional, y Susan Rice, en ese momento embajadora de EEUU en la ONU, convencieron a Obama de respaldar a los rebeldes.

Conclusión

Hay pocas dudas de que Estados Unidos actuó, al menos, en un papel de apoyo durante el armado de los terroristas de al-Qaeda en Siria mucho antes de lo que públicamente se dijo.

Sin embargo, como lo demostró el escándalo de Benghazi, EEUU ya estaba a sabiendas armando a terroristas en Libia, los mismos terroristas que luego trabajarían con el embajador Chris Stevens para enviar el exceso de armas de los escondites de Qaddafi hacia Siria para derrocar al gobierno de Asad.

Con los Estados Unidos armando a al-Qaeda en Libia en el período previo a la guerra de Siria y armando a al-Qaeda poco después de que comenzara la guerra (en Siria), va contra el raciocinio creer que EEUU no estaba armando a al-Qaeda durante el periodo intermedio de aproximadamente un año.

Nota: la publicación en inglés puede ser consultada aquí . Brandon Turbeville escribe para Activist Post. Es autor de siete libros, ha publicado más de 1000 artículos y dirige un sitio web y un programa de radio propios. Puede ser contactado en activistpost@gmail.com