Ocupación israelí avanza en Quneitra y expulsa a empleados de edificios gubernamentales
Las fuerzas de ocupación israelíes intensifican su expansión en el sur de Siria, tomando control de instalaciones gubernamentales y atacando infraestructura clave bajo el pretexto de "inspecciones".
El régimen de Tel Aviv continúa profundizando su ocupación en el sur de Siria, esta vez en la ciudad de Quneitra, donde tropas israelíes rodearon edificios gubernamentales el 30 de diciembre. Según reportó la televisión estatal siria, las fuerzas invasoras exigieron la evacuación de los empleados de oficinas públicas bajo el pretexto de realizar “inspecciones” en busca de armas.
Videos difundidos en redes sociales muestran la presencia de tropas y vehículos militares israelíes en el corazón de Quneitra, específicamente en la antigua ciudad de Al-Baath. Según informó el corresponsal de Al Mayadeen, las fuerzas de ocupación avanzaron hacia instituciones clave como la Dirección de Suministro, la Dirección de Electricidad y el Banco Inmobiliario, además de una panadería automatizada que abastece a la población local.
Estos movimientos se producen apenas un día después de un ataque aéreo israelí en la ciudad industrial de Adra, en las afueras de Damasco, que dejó más de una docena de muertos, incluidos tres combatientes de las Brigadas Quds del movimiento Yihad Islámica en Palestina.
El avance israelí en los Altos del Golán ocupados es parte de una estrategia que busca afianzar su control sobre territorios sirios estratégicos desde el derrocamiento del gobierno de Bashar al-Assad. Además de Quneitra, Tel Aviv ha tomado control de recursos vitales como la represa de Al-Wahda en el río Yarmuk y ha establecido puestos militares permanentes en áreas previamente supervisadas por la ONU.
El régimen de Tel Aviv no solo se limita a la ocupación territorial. En las últimas semanas ha intensificado sus ataques aéreos sobre lo que queda de la infraestructura militar de Siria, devastada tras años de conflicto. Los recientes bombardeos y la toma de instalaciones gubernamentales confirman las intenciones del régimen sionista de mantener su ocupación de forma indefinida, según declaraciones previas del primer ministro Benjamin Netanyahu, quien ya había declarado nulo el acuerdo fronterizo de 1974 entre Siria e Israel.
Mientras tanto, la comunidad internacional guarda silencio frente a estas flagrantes violaciones a la soberanía siria, permitiendo que Tel Aviv continúe su expansión con total impunidad.
Noticias relacionadas
-
Se reanudan las protestas y divisiones políticas en Siria
-
Peligro de colapso en la presa Tishreen en medio de enfrentamientos en el norte de Siria
-
Siria: luz verde para el festín de Washington y Tel Aviv
-
Reacciones internacionales ante los sucesos en Siria