Mañana de terror de la mano de E.I.
Más de cien muertos saldo de siete ataques suicidas coordinados y casi simultáneos, esta mañana en dos ciudades sirias de la costa mediterránea. También al noreste, en Al Qamishli hubo ataques la noche del sábado. E.I. se adjudicó la autoría.
Jableh: 4 ataques
Tres explosiones consecutivas tuvieron lugar cerca de una estación de micros en la ciudad de Jableh. Según reportes, dejaron varios civiles muertos y heridos, y una cuarta explosión golpeo un hospital local.
Tartous: 3 ataques
Inmediatamente después de los sucesos en Jableh, varias explosiones ocurrieron en una terminal de micros de la también costera ciudad de Tartous. El número de muertos excede los 100, según la policía local.
Se trató de terroristas suicidas, que se auto-detonaron. La agrupación extremista takfirí Estado Islámico (E.I.) se adjudicó la autoría de los crímenes.
Según reportes de SANA y RIA Novosti, los cuantiosos heridos graves están hospitalizados en ambas ciudades.
Al Qamishli: ataque en barrio residencial
Un ataque suicida de un comando de 5 integrantes se dio la noche del sábado en un barrio residencial de la ciudad del noreste del país, cercana a la frontera con Turquía, en la provincia de Al Hasaka. Residentes locales informaron de por lo menos dos muertos y varios heridos.
Reacción oficial siria
El gabinete nacional condenó los ataques suicidas ocurridos en Jableh, Tartous y Al Qamishli, así como los ataques de morteros en áreas de Alepo, Nubbul, Al Zahraa y Daraa, causantes de docenas de muertos y heridos entre civiles inocentes.
El Primer Ministro Wael Al Halaqi dijo, en declaración oficial de hoy, que la escalada de acciones terroristas en el país, responde a órdenes de los sostenedores y financiadores de las organizaciones criminales, Qatar, Arabia Saudita y Turquía a la cabeza, en un intento de ocultar las victorias alcanzadas por el Ejercito Árabe Sirio en todos los frentes, así como incrementar la moral de las huestes terroristas con falsas victorias.
Al Halaqi señaló a la comunidad internacional como responsable moral y legal de estos ataques, demandando de la misma que interfiera para presionar a los Estados que sostienen el terrorismo, amenazante de la seguridad y estabilidad internacional.
Las voces oficiales rusas también condenaron los ataques, declarando que los mismos muestran un incremento de la actividad terrorista en el país, y traen grave preocupación, según el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
“Estos hechos demuestran… la fuerte necesidad de continuar dando pasos vigorosos para avanzar con el proceso de negociación”, dijo.
La prensa internacional
Los sangrientos ataques de esta mañana en la costa oeste tuvieron amplia difusión en los medios internacionales, que se preocuparon de consignar e identificar la distribución poblacional siria, al referirse a Jableh y Tartous como “bastiones del régimen”, por tratarse de zonas de mayor proporción de la comunidad alauita del país, a la que pertenece la familia del presidente.
Si bien es correcto el dato poblacional histórico, debe destacarse sin embargo, que utilizarlo hoy para definir la noticia, responde a un ya conocido manejo comunicacional apuntado a reforzar el concepto de conflicto religioso y sectario inter-islámico, algo que dista de la realidad del conflicto sirio donde el terrorismo no diferencia a la hora de cometer sus crímenes.
A su vez este reduccionismo mediático no contempla la inmensa cantidad de sirios provenientes de ciudades del norte y el este, desplazados internos, que se ubican en todas las ciudades del oeste, bajo protección de su gobierno y fuerzas armadas así como de sus connacionales que los acobijan.
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