Damasco: nueva agresión terrorista israelí contra civiles

El impune régimen terrorista de Israel cometió una nueva agresión contra territorio sirio la tarde del lunes 4 de noviembre. La agencia de noticias siria SANA reportó el lunes que la ocupación israelí lanzó una agresión contra varios sitios civiles al sur de la capital siria, Damasco.

Según una fuente militar, alrededor de las 18.05 horas, la ocupación realizó un ataque aéreo desde el Golán sirio ocupado contra varios sitios civiles al sur de Damasco. La fuente señaló que el ataque causó algunos daños materiales.

El corresponsal de la cadena árabe Al Mayadeen en Damasco confirmó haber escuchado dos explosiones en la capital siria y reportó información local que indicaba que la agresión tuvo como objetivo zonas agrícolas y granjas cercanas al Santuario Sagrado de Sayyida Zeinab.

De esta forma, el genocida régimen ocupante israelí suma un nuevo episodio a su sangrienta agenda en la región que incluye también sus ataques e intento de invasión contra la República del Líbano, en un nuevo intento por ampliar la escalada regional en el marco del genocidio que lleva adelante hace un año contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza a lo que suma el exponencial incremento de represión, abusos y brutales violaciones opresoras contra los civiles palestinos de Cisjordania.

Siria apela a la legalidad internacional

A través de los canales diplomáticos Siria pidió a los Estados miembros de las Naciones Unidas que tomen medidas firmes para detener los ataques israelíes a sus territorios, señalando que la continuación de estos ataques se produce como resultado de la incapacidad de adoptar medidas serias para frenar a la entidad y detener sus violaciones.

“La República Árabe Siria condena la agresión lanzada por la entidad sionista esta tarde desde la dirección del Golán sirio ocupado, apuntando a varias zonas civiles al sur de Damasco, lo que causó importantes daños materiales en las zonas atacadas”, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados en un comunicado el lunes.

La declaración del Ministerio añadió que Siria subraya que las prácticas agresivas y criminales de la entidad de ocupación israelí y sus continuos ataques a zonas civiles son el resultado de no adoptar ninguna medida seria para frenar a esta entidad y detener sus graves violaciones contra los pueblos y países de la región.

“Siria pide a los Estados miembros de las Naciones Unidas que adopten medidas urgentes y firmes para detener la agresión israelí y exigir a sus autores que rindan cuentas de sus crímenes”, concluyó el Ministerio.

Seguidilla criminal

El más reciente antecedente contra Siria fue un ataque israelí similar el 31 de octubre , que tuvo como objetivo varios edificios residenciales de la zona industrial al este de la ciudad de al-Qusayr, ubicada unos 35 Km al sur de la ciudad de Homs, capital de la provincia homónima. Tras ese ataque se reportaron varios heridos civiles y daños materiales a zonas residenciales.

El 26 de octubre , las defensas aéreas del Ejército Árabe Sirio repelieron una agresión con misiles israelíes que tuvo como objetivo algunos sitios militares en las regiones central y sur.

Asimismo, previamente el 24 de octubre , un ataque sobre el barrio capitalino damasceno de Kafr Sousa impactó en un edificio residencial con un saldo de dos civiles muertos y al menos siete heridos.

Y no debe dejar de mencionarse también otro reciente ataque terrorista al pueblo sirio y la soberanía de su país por parte del régimen israelí, llevado a cabo el 8 de octubre contra un edificio residencial del barrio damasceno de Mezzah, el cual se saldó con al menos siete civiles martirizados (incluyendo mujeres y niños) y 11 heridos.

Impunidad en serie

Estos recientes reportes son los últimos de una sangrienta y criminal lista de agresiones aéreas contra emplazamientos militares y zonas civiles en el oeste sirio, especialmente apuntando a las propias ciudades cabecera y/o zonas de las provincias de Damasco, Homs, Hama y Alepo, pero también de las ciudades costeras de Lataquia y Tartous, en su mayoría realizados desde el espacio aéreo del Golán Sirio Ocupado o de la hermana República del Líbano que carece de recursos militares para siquiera intentar defender su soberanía aérea.

Si bien dichas agresiones se incrementaron en el último año, a partir de la campaña genocida contra Gaza iniciada en octubre de 2023, ya eran moneda corriente desde mucho antes en forma regular, a razón de un mínimo de un ataque semanal, configurando flagrantes y repetidas violaciones del territorio sirio soberano.

Cualquiera de ellos, en forma individual se constituye en razón más que suficiente para la aplicación de la legislación internacional con acciones que obliguen al agresor a responsabilizarse de sus crímenes. Pero esto no sucederá mientras el sistema global, representado por la ONU, continúe siendo absolutamente disfuncional y groseramente manipulable, convirtiéndose en mera herramienta de un orden mundial injusto.

Un sistema y un organismo que aún hoy sigue actuando en la práctica como el club de los ganadores de la Segunda Guerra Mundial, en el que las principales potencias globales exceden a gusto el alcance de la soberana Asamblea General ostentando el poder de veto en el Consejo de Seguridad; lo cual, en este caso en particular, favorece sostenidamente al terrorismo sionista del régimen de Israel con la permanente cobertura de EEUU que, en materia de proporciones e historial, representa la máxima expresión del doble rasero aplicado a la manipulación unilateral del marco legal internacional.  

Mientras tanto y a sabiendas que juegan en su contra elementos esenciales como el tiempo y el factor demográfico (entre otros), la mesiánica dirigencia extremista del régimen ocupante de Palestina encabezada por el criminal de guerra polaco Benjamin Mileikowsky, continúa con su desesperada operatoria bélica desatada cual perro rabioso genocida que actúa a sus anchas para avanzar con crímenes a destajo en pos de su histórico proyecto expansionista y fundacional del sionismo (desde el Nilo al Éufrates) que tiene como blanco a todo el territorio de Bilad al-Sham y la Siria Natural e histórica.