Civiles abandonan campo de Rukban
Cientos de civiles sirios huyen de campamento de refugiados bajo control de EEUU en el sur de Siria, hacia áreas controladas por el Gobierno nacional.
Damasco ha denunciado repetidamente la ilegal presencia estadounidense en la ciudad sureña siria de Al Tanf y ha insistido en que las fuerzas estadounidenses se retiren de la región de inmediato.
Cientos de refugiados del campamento de Rukban, controlado por la llamada “coalición” y que está ubicado en la frontera con Jordania, viajaron varios cientos de kilómetros al oeste hacia los suburbios de Damasco en busca de ayuda de las autoridades sirias.
En declaraciones a periodistas, algunos de los civiles dijeron que la falta de ayuda humanitaria los llevó a viajar al oeste. Los estudiantes universitarios de Damasco están ayudando a organizar la provisión de alimentos y techo para los refugiados.
"Pensamos que seríamos salvados allí [en el campamento de Rukban] pero como resultado casi morimos de hambre. Resultó que no había nada allí; nada en absoluto", dijo Muttrah Ramadan Houdour, uno de los refugiados. "Incluso los alimentos y medicamentos que teníamos nos los trajeron amigos de Damasco, y los pagamos. Dimos todo lo que teníamos", agregó.
Otros confirmaron que el campamento de Rukban tiene problemas con el suministro de alimentos y agua.
El campamento de refugiados de Rukban se encuentra en el distrito de Al-Tanf, al sur de la provincia central de Homs, y está rodeado de grupos armados de “oposición” apoyados por EEUU. Decenas de miles de civiles huyeron hacia esa área en 2014, con la esperanza de cruzar a la vecina Jordania, cuando DAESH (ISIS) comenzó su asalto en el este de Siria. Las autoridades jordanas no les permitieron entrar en su territorio, lo que resultó en la creación del campamento de Rukban.
Aproximadamente 60,000 refugiados están actualmente basados en Rukban y la base militar de Al Tanf ocupada por los Estados Unidos. Ha habido numerosos informes de armados complicando la vida a los refugiados, bloqueando la entrega de ayuda humanitaria.
Las Naciones Unidas han descrito la situación en el campamento como un "desastre humanitario", mientras EEUU se ha estado dedicando a entrenar “milicias de oposición” (muchos de ellos ex DAESH) en Al Tanf desde 2016. Damasco y Moscú han acusado reiteradamente a Washington de "Escupir grupos móviles de DAESH" desde el área y convertir el sur de Siria en "un agujero negro de 100 kilómetros" en la frontera estatal sirio-jordana".
La semana pasada, el ministro de Exteriores sirio, Walid Al Muallem, criticó la continua presencia militar estadounidense en la región y pidió a EEUU que se retire. El mes pasado, el alto diplomático sirio Bashar Jaafari llamó a la presencia estadounidense en Al Tanf y Rukban "pura agresión y ocupación".
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