Informe Especial: EAU

Polity IV  analiza las características de gobierno, y calificó a EAU  en 2010 con una puntuación de -8 (autocracia). La calificación denota un tipo de gobierno con participación ciudadana limitada o reprimida, elección del poder ejecutivo a través de reglas preestablecidas por la elite política, y ausencia de balance de poder. La calificación alcanzada por el país es similar a la obtenida por Irán, Kuwait, Libia y Siria.

El informe hace hincapié en 3 dimensiones de la gobernabilidad: elección presidencial, límites al poder presidencial, y participación política.

La elección presidencial se describe como un proceso de selección adjudicado y designado por el Consejo Supremo. El cuerpo está compuesto por 7 emires que se reparten los puestos ejecutivos en base a su riqueza. A través de este sistema se elige el presidente, quién designa al primer ministro, el gabinete, la corte suprema y otros puestos de gobierno.

Los límites al poder presidencial son mínimos y moderados. Cada emirato es un territorio federal donde el emir tiene poder absoluto sobre el territorio, la población y el ingreso. Al mismo tiempo, la constitución otorga poca autoridad real a las autoridades federales. Por la misma razón, el poder del emir se limita a la conducción de la política exterior, de defensa, seguridad interior, y la prestación de algunos servicios estatales.

La participación política es reprimida debido a la instauración de un sistema patriarcal, donde las alianzas tribales juegan un papel importante en la construcción de poder. Además, debido al establecimiento del decreto y la ley islámica como herramientas de gobierno, deja a los consejos locales con la responsabilidad de escuchar las demandas sociales.  

Transparency International  mide niveles de corrupción percibida, y calificó con 70 puntos (poca corrupción) a EAU  en 2014. Esa calificación le valió el puesto 25 entre 175 países observados, la mejor ubicación para un país del Mundo Árabe, y dos puestos por delante de Qatar.

Sobre el control de corrupción, el organismo otorga a EAU una calificación de 0,97 puntos (escala +/-2,5). En otras palabras, hay una relación negativa muy fuerte entre los oficiales públicos y el beneficio privado. Quiero decir, no existe una cultura de la corrupción en la administración pública.

Además, el índice ubica al emirato entre los 5 países con empresas privadas operando en el exterior que menos coimas pagan. Ambos índices confirman la ausencia de una cultura de la corrupción. Sin embargo, el secreto bancario sigue brindando un escudo importante para el escrutinio financiero.

Visión de la Humanidad  estima niveles de conflictividad estatal, y asignó a EAU  en 2014 una calificación de 1,762 puntos (poca conflictividad). Esa nota le valió el puesto 44 entre 162 países, con un costo estimado de la violencia de u$s 26.842 millones.

Por su mala calificación se destacan los indicadores importaciones de armas (5/5), oficiales de seguridad y policía (4,5/5) y criminalidad percibida en la sociedad (3,5/5). Mientras que entre los mejores indicadores se identifican a homicidios, intensidad de conflicto (interno), crímenes violentos, impacto de terrorismo, muertos por conflictos organizados (internos), número de conflictos luchados, personal de las fuerzas armadas, exportaciones de armas, personas desplazadas y conflictos luchados (1/5).

Sobre la actividad terrorista EAU  obtuvo una calificación de 0,29 puntos (baja actividad terrorista), alcanzando el puesto 100 entre 162 países.

El Índice de Desarrollo Humano  evalúa el crecimiento social, y en 2014 calificó a EAU  con 0,827 puntos (alto desarrollo humano), alcanzando el puesto 40 entre 187 países. La calificación se ubica por debajo del promedio de la calificación obtenida por los países de alto desarrollo (0,890), y por encima de la media para los países árabes (0,682).

En términos comparados, durante el período 1980-2010 el país refleja un progreso social similar al de Bahréin y Libia. Al mismo tiempo, el indicador años promedios de escolaridad reflejó el mayor crecimiento (170%), mientras que PBI per cápita sufrió un retroceso notable (-70%).

Con respecto al desarrollo desigual entre géneros, el emirato recibió una calificación de 0,244 puntos, alcanzando el puesto 43 entre 149 países. Se destaca que las mujeres ocupan 17,5% de los asientos parlamentarios, el 73% alcanzó el nivel de educación secundaria (10% más que los hombres), y el 46% participa activamente del mercado laboral.

Progreso Social Indispensable  evalúa las condiciones generales de vida y EAU   recibió en 2014 una calificación de 72,79 puntos (medio alto). Esa nota le valió el puesto 39, por detrás de Argentina y por delante de Israel. En términos comparados con países de PBI similar, el país se ubica por debajo del promedio.

De las tres dimensiones que componen el índice la mejor calificada es necesidades humanas básicas (89,63 puntos) y la peor es oportunidades (54,59 puntos), mientras que fundamentos del bienestar recibió 74,16 puntos. Se destaca que el único indicador con una calificación comparativamente mejor a la de sus pares es tolerancia hacia los inmigrantes.

Happy Planet evalúa la capacidad del estado para garantizar vidas largas, felices y sustentables, y calificó a EAU con 31,8 puntos (muy infeliz), ubicándolo en el puesto 129 entre 151 países. La baja calificación es producto de un alto impacto ambiental, que contrarrestan la muy buena experiencia de bienestar y promedio de expectativa de vida medido.

En conclusión, y de acuerdo con los datos ofrecidos por los índices aquí presentados, EAU es percibido como un país autocrático, poco corrupto y poco conflictivo, con progreso social medio alto y alto desarrollo humano, pero muy infeliz.

Nota: Haga click aquí   para visitar la introducción de este informe especial y encontrar una descripción de los objetivos e índices.