E.I. incinera piloto, Jordania ahorca miembros de Al Qaeda
El gobierno de Jordania ejecutó a dos miembros de Al Qaeda al amanecer del día de hoy en la cárcel de Swaqa, en represalia por la ejecución del piloto jordano incinerado por E.I.
En el día de ayer, Estado Islámico (E.I.) hizo pública la incineración en vida del piloto jordano Muaz Al Kassasbeh. Al igual que la decapitación del periodista japonés Kenji Goto, el hecho fue confirmado a través de un video.
Al momento de su muerte, Kassasbeh tenía 26 años y era Teniente de la Real Fuerza Aérea Jordana. El piloto fue capturado por E.I. el pasado 24 de diciembre tras el derribar un F-16, que participaba en la ofensiva liderada por EEUU contra E.I. en Siria e Irak, en cercanías de la localidad de Raqqa.
La muerte del piloto desató el dolor de su padre, quien pidió “venganza por Muaz y su país.” Según la Agencia de Noticias de Jordania, un grupo de manifestantes se congregó en las afueras del Palacio Raghadan, residencia oficial del Rey Adbullah II, para reclamar acciones punitivas contra E.I. y sus seguidores.
También se registraron manifestaciones en Karak, localidad de donde Kassasbeh es originario. Allí, los manifestantes acusaron a las autoridades de no hacer suficiente para la liberación del piloto. Su descontento derivó en el ataque a edificios públicos, que cesó tras la intervención de líderes tribales, informó el portal digital Al Akhbar.
La Gobernación de Karak se ubica en la región sur del país, y es uno de los bastiones de la monarquía jordana. Allí, los líderes tribales poseen un gran poder político y sus demandas son atendidas por el Rey Adbullah II con gran atención. Por eso, el Rey recortó su visita a EEUU tras enterarse de la muerte del piloto, y no demoró en responder a los pedidos de venganza. “Es la responsabilidad de todos nosotros [los jordanos] permanecer unidos y demostrar los verdaderos valores jordanos frente a esta atrocidad,” dijo el monarca.
También se refirió al hecho el Coronel Mamdouh Al Ameri, responsable de prensa, "Nuestro castigo y venganza será tan grande como la pérdida de los jordanos." Mientras que el Ministro de Comunicación, Mohammed Momani, dijo que “La respuesta jordana será extrema.”
La respuesta
Los pedidos de venganza por parte del padre de Muaz y líderes tribales fueron atendidos rápidamente. La respuesta a la incineración de Kassasbeh se dio en la mañana de hoy miércoles. El gobierno dio muerte por ahorcamiento a Sajida Al Rishawi y Ziad Al Karbouli. Ambos eran miembros del grupo Al Qaeda, aliado de E.I. en Siria e Irak. Según fuentes oficiales, Al Rishawi era la contraparte del intercambio de prisioneros entre el gobierno e E.I. para asgurar la liberación del piloto. La negociación se canceló porque E.I. no demostró que Kassasbeh siguiera con vida, y militares jordanos informaron al gobierno que el piloto se presumía muerto desde el 3 de enero.
Al Rishawi fue condenada a muerte en 2005 por su rol en el bombardeo a 3 hoteles en Amán el 9 de noviembre del mismo año. En los ataques a los hoteles Grand Hyatt, Radisson SAS y Days Inn, según el gobierno jordano fallecieron 59 personas y otras 115 resultaron heridas. Por su parte, Ziad Al Karbouly fue condenado a muerte en 2008, por reconocer formar parte de los altos mandos de Al Qaeda y planear ataques contras ciudadanos jordanos en Irak. Ambos permanecían bajo custodia esperando el momento de su ejecución.
Repercusiones internacionales
Ahmed Muhammad Al Tayeb, Gran Imam de la Mezquita de Al Azhar, en relación a la muerte de Kassasbeh declaró que “El Islam prohíbe quitarle la vida a inocentes.” Por su lado, Hassan Abu Alí afirmó que “El Islam es una religión tolerante, y que E.I. tiene nada que ver con Islam.”
Según The New York Times, Emiratos Árabes Unidos decidió terminar su rol dentro de la coalición liderada por EEUU en Siria e Irak. Agregando que el gobierno del emirato pidió a EEUU mayores esfuerzos para la ubicación y rescate de pilotos caídos.
En Líbano, el Primer Ministro Tammam Salam y el líder del partido Movimiento Futuro, Saad Hariri, rechazaron las acciones de E.I. También coincidieron en la necesidad de formar un frente unido para el rescate de los soldados y policías libaneses que permanecen en custodia de E.I. desde agosto del año pasado.
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