Países árabes se suman a EE.UU. contra "Estado Islámico"

Diez países árabes, entre ellos Arabia Saudita, decidieron hoy jueves unirse a Estados Unidos para luchar contra "Estado Islámico" (EI) en territorio de Irak y en Siria, según un comunicado difundido al término de la reunión celebrada en Yeddah en presencia del secretario de estado norteamericano, John Kerry.

Arabia Saudita, Bahrein, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Qatar, Omán, Egipto, Irak, Jordania, Líbano y Estados Unidos "declararon su compromiso de mantenerse unidos contra la amenaza que plantea para la región y el mundo el terrorismo (bajo todas sus formas), incluido el supuesto 'Estado Islámico' ", indicó el comunicado.

Por su parte, Turquía ha rechazado este jueves participar en las acciones militares y ha precisado que se limitará a la ayuda humanitaria. 

La promesa del presidente de EE.UU., Barack Obama, de enfrentar a "Estado Islámico" (E.I.) en Siria y en Irak, deberá expandir las acciones militares ya en marcha y posiblemente requerirá más fuerzas especiales para ayudar a las tropas locales.

Mientras, el ministro sirio de Reconciliación Nacional, Ali Haidar, advirtió de que cualquier intervención militar extranjera en su país sin el consentimiento de las autoridades será considerada como una agresión. Es la respuesta del gobierno sirio al anuncio del plan de Obama contra E.I.

"Una operación de cualquier tipo sin el visto bueno del Gobierno será considerada como un ataque a Siria", dijo Haidar, que es también dirigente de la oposición tolerada por el gobierno, antes de reunirse con el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, que visita el país árabe.

"No queremos que 'Estado Islámico' (E.I.) se convierta en un caballo de Troya para nosotros", indicó Haidar en declaraciones a los periodistas, sin dar más explicaciones.

También Rusia advirtió de que considerará "acto de agresión" cualquier ataque aéreo de EUA contra las posiciones de E.I. en territorio sirio, sin previa autorización del Gobierno de Siria o del Consejo de Seguridad de la ONU.

En este sentido, observadores libaneses y sirios señalaron que la guerra contra esta agrupación extremista, puede terminar siendo la excusa y antesala de un nuevo Sykes- Picot para la región.