Informe Especial: Palestina
La décimo octava entrega del informe especial, El Mundo Árabe según Occidente, está dedicado a Palestina. Los Territorios Palestinos continúan peleando por su constitución como estado, calidad que la Asamblea General de ONU ya le ha garantizado.
Polity IV analiza las características de gobierno, y no ofrece datos para Palestina. Sin embargo, el análisis institucional de la Autoridad Palestina arroja un resultado más cerca de la categoría democracia (+10) que de autocracia (-10). Porque en términos comparados con otros gobiernos de la región, el gobierno palestino es más democrático que las monarquías del golfo y las democracias militares del Norte de África.
La elección del ejecutivo en Palestina es regida por la Ley Básica aprobada en 2002, y establece que la misma se realizará de forma libre y directa. Además, la misma ley estipula claros procedimientos ante una eventualidad vacante del puesto ejecutivo.
Los límites al poder ejecutivo son mínimos, debido a las características naturales de un régimen presidencialista, y porque el Ejecutivo nombra a los miembros del Consejo de Ministros. Además, fuera del período de sesiones ordinarias, cualquier legislación propuesta por el ejecutivo no exige la aprobación del Consejo de Ministros.
La participación política es abierta e institucionalizada, porque la Ley Básica establece que las elecciones en Palestina sean abiertas y directas. En ese sentido, la ley no excluye individuos en base a religión o raza. Sin embargo, el electorado está fragmentado en torno a representaciones locales, reflejadas en la división de la Autoridad Palestina.
Transparency International mide niveles de corrupción percibida, y no calificó a Palestina. El único dato que el índice ofrece al respecto se refiere al Control de Corrupción, categoría a la cual calificó con un puntaje de -0,31 puntos (escala +/-2,5). En otras palabras, hay una correlación entre el ejercicio de una oficina pública y el beneficio privado.
Visión de la Humanidad estima niveles de conflictividad estatal, y no calificó a Palestina en 2014. A pesar de la falta de datos, se puede inferir la existencia de un alto nivel de conflictividad. Este escenario es consecuencia principalmente de la ocupación de los territorios por Israel, y las acciones militares que el ocupante lleva adelante en Palestina.
En ese sentido, los indicadores más relevantes para inferir la situación en Palestina son oficiales de seguridad y policía, homicidios, población encarcelada, manifestaciones violentas, crímenes violentos, terror político, impacto terrorístico, número de conflictos luchados, armas nucleares y pesadas, personas desplazadas y conflictos luchados (externos).
El Índice de Desarrollo Humano evalúa el crecimiento social, y en 2014 calificó a Palestina con 0,686 puntos (medio desarrollo humano), alcanzando el puesto 107 entre 187 países. La calificación ubica al país por encima del promedio para los países de medio desarrollo (0,614) y los países árabes (0,682).
En términos comparados, durante el período 2005-2013 el país refleja un progreso social similar al de Egipto, registrando una mejora acumulada del 5,7%. El indicador años de escolaridad esperados mostró la mayor mejora, seguido por PBI per cápita, años de escolaridad promedio y expectativa de vida. Al corregir el índice por desigualdad, la calificación de Palestina cae un 11,7% a 0,606 puntos, una caída menor al promedio mundial y para países árabes.
Progreso Social Indispensable evalúa las condiciones generales de vida y Palestina no fue calificada en 2014. Dada la precaria situación consecuencia del accionar de la potencia ocupante, se infiere que ninguna dimensión (necesidades humanas básicas, fundamentos del bienestar, y oportunidades) obtendría una buena calificación.
Happy Planet evalúa la capacidad del estado para garantizar vidas largas, felices y sustentables, y tampoco calificó a Palestina. Al igual que con el índice anterior, se infiere que debido a la ocupación y acciones de la potencia ocupante, ninguna dimensión (impacto ambiental, experiencia de bienestar, y expectativa de vida) obtendría una buena calificación.
En conclusión, y de acuerdo con los datos ofrecidos por los índices aquí presentados, solo se puede elaborar una imagen parcial de Palestina. Solo ONU a través del Índice de Desarrollo Humano provee datos fehacientes. Por otro lado, la falta de datos sobre Palestina es alarmante y una situación que merece mayor atención.
Nota: Haga click aquí para visitar la introducción de este informe especial y encontrar una descripción de los objetivos e índices.
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