Siria y Líbano condenan al régimen de Israel por la masacre de al-Rashid

La República Árabe Siria condenó enérgicamente el brutal crimen cometido el jueves por la ocupación israelí contra los civiles palestinos que esperaban recibir ayuda alimentaria en la calle al-Rashid, al oeste de la ciudad de Gaza.

A su vez, la diplomacia de Damasco señaló que la mayoría de los países y pueblos del mundo protestaron contra la continuación del genocidio en Gaza tal como ha demostrado la emisión por parte de la Corte Internacional de Justicia de órdenes obligatorias para detener las masacres israelíes, pero la entidad de ocupación respaldada por EEUU confirma que no cumplirá con la legitimidad internacional, el derecho internacional o el derecho internacional humanitario.

“La entidad racista sionista ha revelado una vez más su rostro sangriento y fascista a través de las masacres que ha estado cometiendo durante casi cinco meses contra mujeres, niños y ancianos palestinos inocentes, y esta mañana sus fuerzas fascistas cometieron una masacre contra los palestinos que esperaban durante semanas por los camiones de ayuda humanitaria que llegaron al suroeste de Gaza, lo que se cobró la vida de más de 100 personas y alrededor de 1.000 resultaron heridos”, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados en un comunicado el jueves.

El Ministerio destacó que Siria, que apoya al pueblo palestino en la Franja de Gaza y Cisjordania, afirma una vez más su enérgica condena a los criminales de la ocupación israelí y los crímenes que cometen, y pide a sus partidarios externos que detengan esta masacre de inmediato de lo contrario serán parte integral de la catástrofe humanitaria cometida por la ocupación y todos aquellos que la apoyan.

En el mismo sentido, el Ministerio de Asuntos Exteriores del Líbano condenó, en una declaración del viernes, el asesinato deliberado de un centenar de civiles palestinos inocentes y las heridas a otros cientos de personas en el mismo hecho sangriento mencionado, en la Franja de Gaza.

La declaración destaca que este asesinato es parte de una política de hambruna y exterminio colectivo empleada contra el pueblo palestino, alimentando la desesperación, empeorando la situación y socavando las perspectivas de una paz justa y completa.

La declaración pide “el establecimiento de una comisión internacional de investigación para determinar la responsabilidad y evitar que el responsable de este crimen escape a la responsabilidad y al castigo”.

El Ministerio reitera en el comunicado la importancia de “adoptar normas internacionales unificadas para detener las violaciones atroces del derecho internacional humanitario en Gaza”.

Esto implica “adoptar posturas internacionales firmes, exigiendo a Israel, como otros, que cumpla con el derecho internacional humanitario, permitiendo la entrega inmediata e incondicional de ayuda humanitaria y cesando el fuego para poner fin a esta guerra sin sentido que aumenta el extremismo y el odio, lo que sólo produce tragedias y males, sentando las bases para futuras guerras y conflictos alimentados por la difícil situación de civiles inocentes”.

Una vez más el veto protector de Washington

El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, condenó el bombardeo realizado por el ejército del régimen israelí, y el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que los civiles habían sido “el objetivo de soldados israelíes”. Al mismo tiempo, el alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad la Unión Europea, el diplomático español Josep Borell, describió el incidente como una “carnicería totalmente inaceptable”.

El Consejo de Seguridad de la ONU programó una reunión de emergencia a puertas cerradas para discutir el incidente, durante la cual Argelia, el representante de la Liga de los Estados Árabes del organismo, presentó un borrador de declaración culpando a las fuerzas israelíes de “abrir fuego”. Si bien 14 de los 15 miembros del Consejo de Seguridad apoyaron la moción, Estados Unidos, continuando con su tradicional cobertura diplomática para su máximo e impune aliado de Tel Aviv, la bloqueó con su derecho a veto.

El Ministerio de Salud de la Franja condenó la masacre perpetrada por la ocupación israelí y dijo que 112 personas fueron martirizadas y más de 750 resultaron heridas.

Asimismo, según informó la cadena Al Mayadeen citando una fuente de campo de la Resistencia Palestina, vehículos blindados y tanques israelíes pasaron sobre los cuerpos de varios mártires, mientras que otros dispararon proyectiles incendiarios contra civiles en el área.

Las fuerzas de la ocupación también detuvieron arbitrariamente a cientos de civiles en la misma zona, transfiriéndolos a un lugar desconocido, mencionó la fuente.