Tensiones en las Granjas de Shebaa

Las tensiones que estallaron entre Hezbollah e Israel el lunes, no darán lugar a un importante conflicto entre las dos partes, aseguraron hoy fuentes de seguridad al diario Al-Joumhouria.

Fuentes cercanas al partido libanés añadieron sin embargo, que "una vez que Hezbollah jura que se vengará de un asalto israelí, cumplirá su juramento."

"La participación del partido en Siria, su enfrentamiento abierto con Arabia Saudí, y su batalla militar contra los takfiris a lo largo de la frontera no lo han distraído desde su permanente frente abierto con Israel", subrayaron.

"La resistencia no habría atacado a Israel sin saber de antemano qué repercusiones dicha operación tendría", añadieron.

Las fuentes por su parte hicieron hincapié en que las "condiciones internacionales no permitirán una mayor violación de seguridad" entre el Líbano e Israel.

"Lo que pasó el lunes se limita a una respuesta rápida y limitada" al asesinato por Israel de un prominente miembro de Hezbollah, Samir Al Quntar en diciembre en un ataque aéreo en Siria, explicaron a Al-Joumhouria.

"La operación Shebaa no debe ser sacada de proporción", insistieron, "por tanto, la situación está bajo control y las tensiones no aumentarán, lo cual ha sido demostrado por la calma que ha impregnado la zona", señalaron.

Las Granjas de Shebaa son tierras libanesas que han estado bajo ocupación israelí desde la guerra de de 1967.

Hezbollah e Israel mantienen refriegas intermitentes en la zona fronteriza en disputa entre el Líbano e Israel y ya en el pasado, el grupo libanés ha golpeado patrullas del ejército israelí en respuesta a ataques contra sus miembros.

En enero de 2015, llevó adelante un ataque en las Granjas de Shebaa contra una patrulla del ejército sionista, en venganza por un ataque israelí previo , en Siria en 2008, en el que murieron seis combatientes de la agrupación libanesa y un miembro de la Guardia Revolucionaria iraní.

En 2006, Israel  dirigió una devastadora guerra contra el Líbano so pretexto de combatir a Hezbollah, en la que murieron más de 1.200 libaneses, la mayoría civiles, y 160 israelíes, en su mayoría soldados.