Parlamento libanés extiende su mandato hasta 2017

La política libanesa lleva varios meses en situación de punto muerto con trece aplazos a la elección presidencial en lo que va del año, por la falta de acuerdo entre los principales sectores políticos Alianza 8 de Marzo y Alianza 14 de Marzo para elegir un candidato consensuado; a su vez sumó a la inacción el temor a posibles consecuencias del conflicto en Siria.

Los partidos que han aprobado la ley de ampliación de mandato, han justificado su decisión por considerar que la situación de seguridad es demasiado inestable para celebrar elecciones.

Este aplazamiento de las elecciones es el segundo que se decide para unos comicios que deberían haberse celebrado en junio de 2013, cuando terminó el mandato actual del Parlamento, oportunidad en que se plantearon los mismos argumentos de seguridad como justificación. Un total 95 de los 128 parlamentarios han apoyado la norma, según ha informado la agencia de noticias libanesa ANN.

Entre las voces en desacuerdo, tanto de un amplio abanico de sectores sociales como del espectro político, se destaca por ejemplo la del patriarca cristiano maronita, Beshara Al Rai, quien ha asegurado que la ampliación del mando del Parlamento es "ilegítima e inconstitucional".

En el mismo sentido se declaró el Movimiento Patriótico Libre (FPM en inglés), dirigido por Michel Aoun, el candidato de la Alianza 8 de Marzo, agrupación que el FPM integra junto con Amal, Hezbollah y el Partido Nacional Social Sirio. El FPM reiteró recientemente su condena de la extensión del mandato del Parlamento, diciendo que es una violación de las prácticas democráticas en el Líbano e informó a través del diputado Ibrahim Kanaan que su partido “apelará ante el Consejo Constitucional la decisión de prorrogar el mandato del parlamento."

Por otra parte desde la Alianza 14 de Marzo liderada por el Movimiento Futuro de Saad Hariri y que postula a Samir Geagea, se acusa al bloque 8 de Marzo de haber negado quórum en las últimas sesiones del Parlamento y ser los culpables del vacío, por no aceptar la propuesta de su candidato Geagea.

A todo esto se debe sumar las fuertes críticas a ambos sectores surgidas desde el Partido Socialista Progresista (PSP en inglés) dirigido por el líder druso Walid Jumblatt .

En suma, un complejo entuerto político que tiene congelada a la dirigencia política del país, que incluye una serie de implicancias e injerencias externas de variados colores y del cual los ciudadanos libaneses se sienten crecientemente rehenes día a día.