Líbano denunciará a Israel por destrucción de edificio histórico en Baalbek

El Líbano prepara una denuncia internacional contra Tel Aviv luego de la destrucción del edificio Menchiyé en Baalbek, un inmueble patrimonial ubicado cerca de la histórica ciudadela. El Ministerio de Cultura de Líbano, a través de su ministro saliente, Mohammed Mortada, instruyó al director general de Antigüedades, Sarkis Khoury, a elaborar un expediente detallado sobre la demolición del edificio, que fue devastado por un bombardeo israelí.

La acción busca responsabilizar a la ocupación israelí por lo que las autoridades libanesas consideran un ataque contra el patrimonio cultural y las infraestructuras históricas del país.

El edificio Menchiyé, construido en piedra a principios del siglo XX, forma parte del legado histórico de Baalbek, una ciudad reconocida por sus monumentos arqueológicos y su valor cultural incalculable. El Ministerio de Cultura ha solicitado a Khoury que coordine con el secretario general del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hani Chmaytelli, para formalizar una denuncia urgente ante los organismos internacionales, y ha calificado las acciones del régimen israelí como "crímenes de guerra" que deben ser juzgados bajo el derecho internacional.

Más de 100 parlamentarios libaneses han unido sus voces en una petición dirigida a la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, para solicitar la protección de sitios históricos como Baalbek, Tiro y Saïda, entre otros lugares de importancia cultural en el Líbano que se encuentran bajo amenaza debido a los bombardeos. En su carta, los diputados han enfatizado que "la devastadora guerra contra el Líbano ha causado graves violaciones a los derechos humanos y crímenes atroces" y que la protección de estos sitios patrimoniales es una necesidad urgente.

Las ofensivas del régimen de Tel Aviv en Baalbek y sus alrededores han cobrado decenas de vidas y han dejado numerosos daños, generando una preocupación creciente sobre la conservación del patrimonio cultural en la región. Estos ataques, enmarcados en una ofensiva sionista que se intensifica desde hace semanas, han puesto en peligro no solo la vida de los libaneses, sino también la preservación de monumentos históricos que son parte del legado cultural de la Humanidad.

El Líbano espera que esta acción ante organismos internacionales no solo responsabilice al régimen de Tel Aviv por los daños causados, sino que también permita fortalecer la protección internacional sobre los sitios arqueológicos y culturales del país.