Amnesty: Israel bombardea el Líbano con municiones de fósforo prohibidas

Las fuerzas de ocupación israelíes están utilizando proyectiles de artillería que contienen fósforo blanco prohibido internacionalmente en el sur del Líbano, afirmó un reporte de Amnistía Internacional el martes, subrayando que los civiles en zonas residenciales se vieron directamente afectados por la munición prohibida.

Las fuerzas de ocupación israelíes, según la organización de derechos humanos, dispararon municiones de fósforo blanco hacia el sur del Líbano durante operaciones militares llevadas a cabo en toda la frontera libanesa-palestina entre el 10 y el 16 de octubre.

La organización pidió una investigación sobre lo que consideró un “crimen de guerra” cometido por el régimen de Israel en su reciente ataque a la ciudad de Dhahiriya días antes, donde el ataque no distinguió entre civiles y personal militar, resultando en al menos nueve civiles damnificados.

A través de los testimonios de profesionales como el doctor Haitham Nisr, médico de urgencias en el hospital italo-libanés de Dhahiriya y del director regional de la Defensa Civil libanesa, Ali Safieddine, Amnistía Internacional explicó que se reunieron pruebas convincentes que documentan el uso de fósforo blanco en tres incidentes, y explicó que hubo tres casos entre el 10 y el 16 de octubre en los que se utilizó en Dhahiriya, así como en las ciudades fronterizas de Mari y Aita al-Shaab.

Por otra parte, la directora regional adjunta de Amnistía Internacional, Aya Majzoub, afirmó que el uso indiscriminado de fósforo blanco por parte del ejército israelí fue un “acto horrible” que viola el derecho internacional humanitario.

Añadió que el uso ilegal de fósforo blanco en Dhahiriya “puso en peligro la vida de los civiles”, muchos de ellos fueron hospitalizados y los residentes de la aldea se vieron obligados a huir mientras sus casas y vehículos eran quemados.

Majzoub subrayó que las fuerzas de ocupación deben cesar inmediatamente el uso de fósforo blanco, especialmente en zonas pobladas, y cumplir los compromisos asumidos en 2013, a pesar de haberlos ignorado.

También la organización Human Rights Watch (HRW) confirmó que la ocupación israelí utilizó fósforo blanco en sus ataques contra Gaza y el Líbano los días 10 y 11 de octubre.

En un artículo de preguntas y respuestas sobre el fósforo blanco, Human Rights Watch expresó su preocupación por el uso de fósforo por parte de la ocupación israelí en operaciones militares en Gaza y el Líbano, destacando los riesgos graves y a largo plazo que representa para los civiles.

Human Rights Watch corroboró estas afirmaciones con pruebas en vídeo procedentes del Líbano y Gaza, que mostraban múltiples ráfagas aéreas de fósforo blanco disparadas con artillería sobre el puerto de la ciudad de Gaza y dos localidades rurales a lo largo de la frontera ocupada entre Palestina y el Líbano.

El fósforo blanco, con su doble capacidad de marcar, señalar y oscurecer o como arma incendiaria, puede provocar quemaduras graves a personas e incendiar estructuras, campos y otros objetos civiles en las proximidades.

El derecho internacional prohíbe explícitamente el uso de fósforo y tales acciones se consideran violaciones por parte de las fuerzas de ocupación. Vale la pena señalar que los asaltos que emplean armas incendiarias lanzadas desde el aire en zonas civiles están prohibidos según el Protocolo III de la Convención sobre Armas Convencionales (CAC).

Proyectiles de fósforo blanco en la frontera con Líbano

El Laboratorio de Pruebas del Programa de Respuesta a las Crisis de Amnistía Internacional verificó fotos tomadas por profesionales de la fotografía de la agencia AFP el 18 de octubre cerca de la frontera libanesa.

Estas fotos muestran unos proyectiles de munición de humo de fósforo blanco de 155 mm alineados para usar junto a obuses M109 del ejército israelí. Estos proyectiles tienen un característico color blanco levemente verdoso y unas bandas rojas y amarillas, así como la leyenda M825A1 y D528, respectivamente, que es la nomenclatura del proyectil y el código de identificación del Departamento de Defensa estadounidense (DODIC) para las municiones basadas en fósforo banco, como ya documentó Amnistía Internacional también cerca de la valla de Gaza. Aunque son códigos y nomenclaturas estadounidenses, Amnistía Internacional no puede confirmar el lugar donde se fabricaron estos proyectiles.

Propiedades químicas

El fósforo blanco es un combustible (se enciende cuando se expone al oxígeno) y una sustancia química gravemente mortal. La reacción combustible produce un humo blanco ligero y denso y un calor de aproximadamente 815°C.

El fósforo blanco es muy soluble en la carne humana y provoca quemaduras térmicas y químicas mortales que pueden llegar hasta los huesos.

El contacto directo es extremadamente insoportable y puede provocar daños duraderos en los órganos internos. Incluso inhalar su vapor puede provocar una inflamación grave de la tráquea.

Según el derecho internacional

El uso de bombas de fósforo blanco, que entran dentro de la categoría de armas incendiarias en el derecho internacional, se rige por el artículo 2 del Protocolo III de la Convención sobre Ciertas Armas Convencionales de 1980 (de la cual Israel es signatario).

El artículo 2.1 establece que el uso de bombas de fósforo blanco contra civiles y bienes de carácter civil está absolutamente prohibido.

Además, el artículo 2.2 especifica que incluso atacar mediante ataques aéreos cualquier objetivo militar ubicado dentro de una concentración de civiles también está prohibido categóricamente.

Precedentes en el empleo de fósforo por parte del régimen israelí

Las fuerzas de ocupación israelíes llevan mucho tiempo utilizando diversas armas prohibidas internacionalmente contra civiles, en violación del derecho internacional humanitario.

Han empleado bombas de fósforo blanco en 2006 contra civiles libaneses, en 2008-2009 y nuevamente en 2014 contra civiles palestinos en Gaza.

En los tres casos, el régimen ocupante afirmó haber utilizado bombas de fósforo con fines de iluminación.