Fuerzas sirias ingresarán a Afrín

El informe de SANA llega solo 24 horas después que dirigentes kurdos anunciaran que el EAS y las fuerzas kurdas  YPG habían llegado a un acuerdo que permitiría a los primeros ingresar a Afrín, al norte de la provincia de Alepo, para repeler la agresión turca iniciada el 20 de enero.

Según difundieron medios kurdos y occidentales, el alto funcionario kurdo en Afrín, Badran Jia Kurd, declaró a Reuters que las fuerzas kurdas sirias y el gobierno del país acordaron el despliegue de tropas del ejército sirio a lo largo de las posiciones fronterizas en la región para detener el azote de la campaña turca, y que los militares entrarían en el cantón durante las próximas 48 horas.

"Podemos cooperar con cualquier parte que nos ayude frente a los bárbaros crímenes y el silencio internacional", dijo Jia Kurd.

En cuanto a las condiciones del acuerdo entre Damasco y los kurdos, estas aún se desconocen aunque según el funcionario kurdo, el acuerdo es puramente militar y no incluye ningún arreglo político. "En lo tocante a cuestiones políticas y administrativas en la región, se acordarán con Damasco en las etapas posteriores a través de negociaciones y discusiones directas", dijo.

Si bien aun se esperan declaraciones oficiales sirias y tampoco se brindó el tiempo exacto para la entrada de las fuerzas nacionales a Afrín; su llegada marcará el regreso de las tropas sirias a esta zona del país desde 2012.

Perspectiva

Con la agresión turca a punto de cumplir un mes, el presente cuadro bélico que tiene a las fuerzas sirias ocupadas en la finalización de la guerra terrorista de los frentes de Idleb, Ghouta Oriental, Homs y Deir Ezzor, sumado a la persistencia de los dirigentes kurdos en pos de evitar ceder terreno a las fuerzas leales, no han permitido hasta la fecha la necesaria respuesta militar siria ante la agresión de Ankara y sus agentes en el norte del país sobre el cantón de Afrín.

Mientras tanto, la defensa por parte de los kurdos YPG no ha podido alcanzar la máxima efectividad, desgastándose merced a los bombardeos aéreos turcos y las operaciones terrestres simultaneas en múltiples frentes.

Por otra parte, desde inicios de la crisis en Siria, la relación entre el gobierno y los ciudadanos sirios de la minoría kurda ha sido compleja, mostrando tanto signos de una deseable y sana colaboración, así como puntos y momentos de tensión toda vez que el doble juego del Partido de la Unión Democrática (PYD) y su brazo militar, las llamadas Unidades de Protección Popular (YPG) osciló por demás entre una manifiesta intención de “autonomía federativa” dentro del Estado Sirio y un accionar pseudo-secesionista funcional a los objetivos cantonizadores para Siria y la región de las águilas de Washington, su principal soporte.  

Sin embargo, la República Árabe Siria que sigue luchando por terminar con el cáncer terrorista en sectores del país mientras a su vez es amenazada por constantes agresiones y violaciones del régimen sionista de Tel Aviv, ha seguido los pasos legales correspondientes al denunciar por la vía diplomática (Consejo de Seguridad de la ONU), la ilegal operación turca en su territorio. Al carecer de respuestas, como era de esperarse, ha amenazado con responder de manera apropiada a la inaceptable y usurpadora agresión del ejército turco y sus agentes (FSA) sobre Afrín.

Por todo ello, desde la primera semana de la invasión turca, han circulado versiones sobre un acuerdo entre Damasco y los kurdos para la apropiada defensa del territorio nacional en Afrín, algo que tras un mes de demora, se estaría dando finalmente en breve, merced a la presente primicia.