Ejército israelí destruye viviendas palestinas en Cisjordania

Cientos de soldados israelíes han comenzado a destruir casas en la aldea palestina de Sur Baher a pesar de las protestas de activistas y ciudadanos palestinos.

Los residentes del vecindario Wadi al-Hummus del poblado dijeron a los medios locales el lunes que 16 edificios residenciales, que albergan alrededor de 100 apartamentos, fueron atacados. 

"Los preparativos comenzaron después de la medianoche cuando cientos de soldados israelíes armados y con excavadoras irrumpieron en la ciudad. Las familias fueron expulsadas de sus propios hogares", afirmó la Organización de Liberación de Palestina (OLP) via Twitter.

El ejército israelí considera que los hogares, que están cerca de un muro de separación israelí que cruza la Cisjordania ocupada , son un “riesgo para la seguridad”.

El mes pasado, la Corte Suprema de Israel falló a favor de los ocupas y puso fin a una batalla legal de siete años, y estableció el lunes como fecha límite para derribar las casas. 

Los palestinos dicen que esta operación sentará un precedente para otras ciudades a lo largo de la ruta de la frontera impuesta, que se extiende por cientos de kilómetros a través de la Cisjordania ocupada.

Un periodista de Al Jazeera informó desde la zona de demolición que la acción israelí comenzó alrededor de las 7:15 am hora local.

"Escuchamos explosiones muy fuertes provenientes de un edificio justo al lado de donde estamos ahora; era de una excavadora mecánica que estaba arrancando parte del techo de un edificio que era el hogar de dos familias", dijo. 

"El padre de una de las familias ha estado sentado en la calle viendo cómo se destruye su casa", comentó.

'Cultura de la impunidad'

Dalia Qumsieh, abogada del grupo de derechos palestinos Al Haq, informó a un medio local desde el inicio de la ocupación israelí, el estado "siempre ha mantenido estas políticas de destrucción de propiedades y hogares palestinos en los territorios ocupados”

"El caso de Sur Baher representa la traducción física de que la cultura de impunidad prevalece", dijo Qumsieh.

Además, afirmó que las demoliciones son parte de "una situación de múltiples violaciones masivas de derechos humanos", que incluye la destrucción militar injustificada de bienes, la transferencia forzosa de palestinos, el propio muro de separación y, finalmente, la violación de la soberanía palestina y la absoluta derecho a la autodeterminación.