Entuerto presidencial: capítulo 19

Mientras el agonizante sistema de distribución de poder según pertenencias religiosas se mantiene en punto muerto en la definición del cargo presidencial, dirigentes de las máximas agrupaciones de la Comunidad Islámica (“Movimiento Futuro” y “Hezbollah”), buscan mitigar el problema mediante medidas menores procurando distender tensiones sectarias.

A su vez este martes una delegación oficial francesa, mantuvo reuniones con la “Coalición 14 de Marzo” (“Movimiento Futuro” / “Fuerzas Libanesas”), así como con el primer ministro Salam y  máximas autoridades y actores de peso en la escena política del Líbano.

Por su parte Walid Jumblatt, insistió en señalar a los “responsables” del vacío presidencial señalando nuevamente a los dirigentes de los dos mayores partidos identificados con la Comunidad Cristiana, y marcar su “tercera posición” desde la Comunidad Drusa.

Futuro y Hezbollah toman medidas para reducir tensiones sectarias

El Movimiento Futuro y Hezbollah dieron el visto bueno este martes, a prácticas medidas para mitigar las tensiones sectarias en el país mediante la remoción de sus propias consignas políticas y carteles, de las calles de Beirut y otras áreas.

Ambos influyentes partidos rivales, también rechazaron la práctica de fuertes ‘balaceras al aire’ a modo de celebración bajo el motivo que fueren, merced a que recientemente estas sacudieron partes de Beirut y sus suburbios sur, la semana pasada; antes, durante y después del discurso del líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah.

También avanzaron en los preparativos para poner en práctica un plan de seguridad del gobierno en la región de la Bekaa norte para acabar con los secuestros extorsivos, venganzas, narcotráfico y robos de automóviles, según un comunicado emitido después de la quinta ronda de conversaciones entre altos funcionarios del Movimiento Futuro y Hezbollah, llevadas a cabo en la residencia del presidente del Parlamento Nabih Berri en Ain Al Tineh.

"Los participantes continuaron la discusión sobre una serie de puntos de una manera franca y responsable”, dijo el comunicado.

La reunión del martes se llevó a cabo en un contexto de renovada tensión entre las dos partes, causada por los disparos de celebración de los seguidores de Hezbollah y el encendido discurso de Nasrallah sobre nuevas reglas de enfrentamiento con Israel que generó fuertes criticas desde Futuro y políticos de la “Coalición 14 de marzo” (que lidera), quienes advirtieron que las declaraciones de Nasrallah pusieron en peligro la Resolución 1701 de la ONU, que pusiera fin a la guerra con Israel de 34 días de duración en 2006.

El discurso de Nasrallah es "unilateral y precipitado y elimina la voluntad del pueblo libanés que está comprometida con la Resolución 1701", dijo que el bloque parlamentario de la coalición, en un comunicado emitido después de su reunión semanal, presidida por el ex primer ministro Fouad Siniora.

El bloque también denunció las salvas de disparos de celebración por los partidarios de Hezbollah que reverberaban en partes de Beirut y los suburbios sur la semana pasada. "El fuego y el disparo de granadas propulsadas por cohetes transformaron la capital en una ciudad del terror, miedo y pánico que intimidó a los ciudadanos, estudiantes y peatones y causó daños materiales", dijo el comunicado.

Agregó que estos disparos de celebración van en desmedro del objetivo del diálogo en curso entre Hezbollah y Futuro para reducir las tensiones sectarias.

Tras una reunión de seguridad presidida por el ministro del Interior Nouhad Machnouk este lunes, se acordó comenzar la campaña para eliminar las consignas políticas, retratos, señalización y banners de Hezbollah, el Movimiento Futuro y el Movimiento Amal de Nabih Berri, de las calles de Beirut y a lo largo de la ruta costera desde la ciudad sureña de Sidón hasta Trípoli en el norte, a partir del jueves.

Reducir las tensiones entre líderes y comunidades sunnitas y shiítas es el principal punto de la agenda del diálogo, que también incluye la búsqueda de un mecanismo que permita la elección presidencial, así como impulsar los esfuerzos para combatir el terrorismo, la promoción de una nueva ley electoral y reactivar las estancadas instituciones del Estado.

El diálogo entre Hezbollah y el Movimiento Futuro ha ganado el apoyo de políticos rivales en el plano interno, así como de Arabia Saudí, Irán, Egipto, los EE.UU. y la Unión Europea, en el plano internacional.

Visita del alto funcionario francés

Mientras tanto, el enviado presidencial francés Jean Francois Girault realizó una nueva ronda de conversaciones con los líderes libaneses acerca de la crisis presidencial que cuenta ya con 8 meses de duración.

Girault, jefe del Departamento de Oriente Medio y Norte de África del Ministerio de Relaciones Exteriores francés, se reunió por separado con el primer ministro Tamam Salam en el Grand Serail, con Berri en Ain Al Tineh, y con el canciller Gebran Bassil. También se reunió con el ex presidente Michel Suleiman, quien hizo hincapié en la necesidad de elegir a un nuevo jefe de Estado sin intervención extranjera, y el ex primer ministro Najib Mikati.

Durante la reunión de una hora con Salam, Girault informó al primer ministro sobre "los esfuerzos realizados por la diplomacia francesa para ayudar a garantizar la celebración de las elecciones presidenciales libanesas", según informó la Agencia Nacional de Noticias estatal. Asimismo se dio cuenta que Girault revisó con Salam la situación en el Líbano y la región.

El funcionario de Paris llegó a Beirut el lunes por la noche como parte de una iniciativa francesa destinada a romper el estancamiento presidencial libanés. Esta es la segunda visita de Girault al país del cedro, en menos de dos meses como parte de una gira regional. A su vez, había visitado Arabia Saudita, Irán y el Vaticano para conversar sobre el estancamiento presidencial del país.

Girault, según un funcionario libanés que se reunió con él, dijo que Francia y Occidente en general están dando máxima importancia a los esfuerzos internos que se reflejan en el diálogo intra-islámico así como el diálogo intra-cristiano, dirigidos a alcanzar un terreno común para acabar con el vacío en la presidencia.

El enviado francés reiteró que su iniciativa es puramente técnica, es decir, que trata de recoger las opiniones de los partidos políticos libaneses y combinarlas, dijo el funcionario.

Agregó que Girault presentaría un informe detallado sobre el resultado de sus conversaciones en Líbano a su gobierno que luego lo discutiría con las potencias regionales e internacionales interesadas en el vacío presidencial, así como con las partes libanesas a ambos lados de la división política.

Girault en reunión con “14 de Marzo”

A su vez, la noche del martes se llevó a cabo una reunión entre el funcionario francés y representantes de la Coalición 14 de marzo, según el diario local Al-Joumhouria.

Al-Joumhouria citó fuentes tras la visita de Girault, diciendo que el funcionario ha destacado "la importancia de que los libaneses estén listos para aprovechar cualquier entendimiento regional o internacional".

La visita de Girault "se destinó a exhortar a los libaneses a tomar la valiente decisión de elegir presidente, ya que las cosas están congeladas a nivel externo y la única solución es una decisión tomada enteramente por el Líbano", dijo una fuente. 

Jumblatt y la “tercera posición” drusa

 “La crisis que enfrenta Líbano sobre su incapacidad para elegir a un presidente es un tema cristiano”, sentencio una vez más  este miércoles, el jefe del Partido Socialista Progresista (PSP), y líder de la Comunidad Drusa, Walid Jumblatt.

"El problema está en la mentalidad de algunos cristianos, y no es mío", dijo Jumblatt al periódico Al Akhbar.

Expresó su preocupación de que los libaneses "ya no sienten la vacante en el sillón presidencial, como consecuencia de las diferencias internas entre los líderes cristianos."

Jumblatt también reafirmó su apoyo al candidato presidencial declarado del PSP, diciendo: "Yo aseguro a todos, cercanos y lejanos, que no voy a renunciar a la candidatura de Henry Helou." 

Capítulo 19 – Febrero 2015

Líbano ha estado sin presidente durante más de ocho meses, desde que el período de Suleiman terminó en mayo pasado. Mientras que la alianza liderada por Hezbollah “8 de Marzo” se ha parado detrás del líder del Movimiento Patriótico Libre, Michel Aoun en la carrera presidencial, la “Coalición 14 de Marzo”, liderada por el Movimiento Futuro, sigue apoyando al líder de las Fuerzas Libanesas, Samir Geagea.

Los legisladores han frustrado 18 (dieciocho) intentos para elegir a un nuevo presidente, debido a la falta de consenso . Una nueva sesión de elección se fija actualmente para el 18 de febrero.

Así el Líbano se encuentra por estos días en las postrimerías del capítulo 18 de la novela presidencial y a las puertas de iniciar posiblemente el capítulo 19 de este “embarazoso” entuerto que paradójicamente está, a su vez, encaminándose ya a los nueve meses de vida.

Como todo embarazo, se debería trata de nueve especiales meses de cuidados y amorosa dedicación para llegar a dar a luz un vástago sano. En este caso esa sufrida madre que es el Líbano, se encuentra con problemas físicos por no poder poner en armonía sus “extremidades”. Para más se le han sumado al evento distintos obstetras extranjeros, quienes extrañamente han mostrado “anómalos intereses” en la definición del nombre del pequeño. Cerrando el cuadro aparece un nuevo doctor con acento francés, quien contradictoriamente tira de un brazo mientras proclama la necesidad de no intervenir en el "proceso natural”.

En compañía de este prolongado vacío presidencial, están presentes otras cuestiones como el histórico enfrentamiento con el limítrofe, expansionista, usurpador y criminal régimen de Tel Aviv, sumado al posible grado de vulnerabilidad ante la crisis regional en los hermanos Estados vecinos de Siria e Irak, (léase la incursión desestabilizadora en territorio libanés del accionar extremista sectario y criminal presente en Siria e Irak), más la situación de los refugiados sirios, así como las tensiones sectarias internas, la injerencia de actores regionales y potencias internacionales en la vida política del país.

Todos ellos son problemas “esenciales” sufridos por la ciudadanía libanesa que en su amplia mayoría vive este difícil y tortuoso momento político institucional con un alto grado de decepción hacia la dirigencia política, llegando en algunos casos a culparla abiertamente por llevar de manera intencional al país hacia el abismo.

Próxima parada, 18 de febrero.