Irak lanza operación a gran escala para recuperar Anbar

El gobierno iraquí comenzó el lunes una muy esperada operación militar a gran escala para desalojar a E.I. de la provincia occidental iraquí de Anbar, según anunció un portavoz militar. El vocero del Comando de Operaciones Conjuntas, Brig. General Yahya Rasool, dijo en una declaración televisada que la operación comenzó en la madrugada del lunes y que las fuerzas del gobierno están respaldadas por los combatientes pro-gubernamentales.

Esta no es la primera vez que el gobierno iraquí ha anunciado una operación para retomar Anbar, donde varias ciudades clave, incluyendo la capital provincial de Ramadi, permanecen bajo control de los extremistas. En mayo, las autoridades anunciaron una operación para retomar Ramadi, pero no ha habido ningún progreso importante en el terreno desde entonces. En un breve comunicado, el primer ministro iraquí, Haider Al Abadi, se comprometió a "tomar venganza de los delincuentes de E.I. en el campo de batalla... y sus crímenes cobardes contra civiles desarmados sólo aumentará nuestra determinación de perseguirlos y expulsarlos de la tierra de Irak".

E.I. tomó gran parte de Anbar a principios de 2014 y capturó Ramadi en mayo de ese año. Las fuerzas iraquíes, que habían tenido un progreso constante en contra de los extremistas en los últimos meses con la ayuda de la campaña aérea, calificaron de gran victoria la recaptura de Tikrit , ciudad natal de Saddam Hussein, completada el mes pasado.

Durante las últimas semanas, las tropas se han estado moviendo para cortar las rutas de suministro de los militantes sectarios y para rodear y aislar Ramadi y Faluya. Rasool no proporcionó más detalles sobre las operaciones en curso. Al mediodía, la televisión estatal del país informó que fuerzas gubernamentales recapturaron aldeas y áreas alrededor de Faluya.

Horas después del anuncio de la operación militar, el Ministerio de Defensa de Irak anunció la llegada de cuatro F-16 aviones de combate de la base aérea estadounidense de Balad al norte de Bagdad. Ellos son parte de los 36 F-16 comprados por el gobierno iraquí. Los nuevos aviones de combate impulsarán a la Fuerza Aérea de Irak, que sólo depende de varios aviones Sukhoi de segunda mano de fabricación rusa.