La Embajada de Siria recibió a Monseñor Santiago

La sede diplomática siria, encabezada por su Jefe de Misión Maher Mahfouz, en compañía del cuerpo diplomático y consular, abrió sus puertas el viernes 1 de marzo para brindar un emotivo encuentro de bienvenida a Monseñor Santiago .

Autoridades

Participaron del evento, la Subsecretaria de Culto de la Nación, Embajadora Claudia Russo Bernagozzi, el Director General de Asuntos Internacionales de la Dirección Nacional de Migraciones, Sr. Osmar Alza y los Sres. embajadores de Palestina, Egipto, Argelia, Rusia y Armenia.

Monseñor arribó en compañía del cuerpo clerical de la Catedral San Jorge y de la Arquidiócesis Antioquena de la República Argentina a quienes se sumó la participación de altas autoridades de las iglesias antioquenas del continente y los obispos de la Iglesia Ortodoxa Rusa en el Exterior, y de Buenos Aires, Centro y Sudamérica de la Iglesia Ortodoxa del Patriarcado de Serbia y el Arzobispo de la Iglesia Apostólica Armenia.

La comunidad islámica del país estuvo representada por el Sheij Abdel Nabi Al Hafnawi, Imam del Centro Islámico de la República Argentina (CIRA), junto al presidente del CIRA, Aníbal Bakir.

Por su parte, las instituciones de la colectividad árabe sirio libanesa de la ciudad y el país fueron representadas por el presidente de la Federación de Entidades Argentino Árabes (Fearab Argentina), Ricardo Nazer y la presidenta de Fearab Buenos Aires, Susana Yedid, junto a un conjunto de dirigentes institucionales e integrantes de la comunidad ortodoxa de la ciudad.

Asimismo, las colectividades del país también estuvieron presentes a través del Secretario General de la Federación Argentina de Colectividades (FAC), Gustavo Osman Fagale.

Mensajes

Llegada la hora de las disertaciones, el Jefe de Misión, Maher Mahfouz brindó un mensaje de bienvenida en el que destacó la importancia del encuentro como expresión de la “solidez de la convivencia de la sociedad siria” que “representa el entendimiento y la tolerancia entre todos sus componentes a lo largo de la Historia desde el nacimiento de Cristo hasta que Dios redima la tierra”.

“Mediante esa concordia, nuestro pueblo logró superar la guerra terrorista impuesta y Siria hoy se está encaminando hacia el triunfo final contra el terrorismo blasfemo”, agregó.

A su vez, destacó la labor humanitaria realizada a lo largo de los años de la guerra en Siria y hasta hoy por el Departamento de Relaciones Ecuménicas del Patriarcado de Antioquia, realizando actividades de asistencia en beneficio de todos los sirios desplazados y damnificados, sin distinción, así como restaurando escuelas, iglesias y patrimonio histórico, “siendo de esa manera uno de los verdaderos pilares que ayudó a aliviar el sufrimiento humano de los damnificados, sin diferenciar a uno del otro”, afirmó.

“Siria y el Cristianismo tienen una historia repleta de santidad y espiritualidad. Nuestro pueblo de la localidad de Maloula sigue hablando el arameo, el idioma de Cristo. Y las fronteras del sur de nuestro país, las más cercanas a la Tierra Santa de Palestina, fueron el paso para sus discípulos a nuestra tierra, convirtiendo a Siria en el punto de partida de los cristianos que esparcieron el Evangelio por todo el mundo”, dijo.

Como conclusión, manifestó a Monseñor la total predisposición de la casa diplomática para colaborar con la Arquidiócesis Antioquena en su noble misión espiritual en el país, y deseó a su eminencia éxitos y prosperidad en su nueva tarea.

A continuación, Monseñor Santiago agradeció al jefe diplomático el afectuoso recibimiento de la misión siria y destacó lo maravilloso de la reunión de afecto y hermandad de los presentes, que conjuga todos los colores religiosos y sociales sin distinción, lejos del sectarismo y el extremismo, “constituyéndose en una pequeña muestra de nuestro país, Siria, en la que conviven en armonía cristianos y musulmanes en un mismo país, una misma Patria y una misma hermandad”.

Con respecto a la crisis que aqueja a Siria, Monseñor destacó que “cuando decimos la palabra Siria, recordamos con ella a la Biblia, donde es mencionada en el relato del nacimiento de Cristo, y cuando mencionamos al Apóstol Pablo, mencionamos específicamente a Damasco. Y Siria sigue presente y vigente, así como Nuestro Señor Jesús quien dijo una frase muy especial que está en la Biblia: ‘los cielos y la tierra desaparecen, pero ni una letra de mis palabras desaparece’. Por ello, Siria sigue vigente y encaminada hacia una prosperidad aún mayor”.

A su vez, Monseñor elevó una súplica de sanación y fortalecimiento para Siria, y expresó que “si bien Siria está sufriendo, tenemos fe en que N.S. Jesús escuchará las suplicas del pueblo sirio que está como en una barca rodeado de un fuerte oleaje. Tal vez tengamos que elevar un poco más la voz con nuestras súplicas para que el Mesías nos proteja y traiga el esperado sosiego y la paz”.

Cerrando su mensaje, agradeció al jefe de misión su hospitalidad y hermandad en este primer encuentro que será seguido por otros igualmente fraternales; así como suplicó por bendiciones para la tarea de la misión siria en Argentina.

Por su parte, el presidente del CIRA, Aníbal Bakir, expresó el gran honor que es para la comunidad islámica recibir a S.E. en Argentina y también destacó el espíritu de hermandad de la sociedad siria, coincidente con el mensaje del Islam y del Cristianismo.  “No hay manera de que dividan a la sociedad siria, una sociedad donde conviven el Islam y el Cristianismo. Somos una sola familia, ambos practicamos el mensaje divino de N.S. Jesús y del Profeta Muhammad que es el mensaje de la paz para la Humanidad”, dijo.

“Su Eminencia, es muy importante para nosotros su presencia, y para quienes somos de familia siria que ud. traiga ese mensaje de paz que nació en la milenaria tierra Siria y la Tierra Santa de Palestina, donde descendió para la Humanidad toda. Quiera Dios que vuelva la paz a nuestro país, Siria, y si hay paz en Siria, sin ninguna duda, esa paz se extenderá en todo el mundo”, concluyó.

Finalizando las palabras, Ricardo Nazer, presidente de Fearab Argentina expresó la alegría y el afecto con que la colectividad árabe sirio libanesa en su conjunto recibe a Monseñor, ya que “todos nos consideramos aquí hermanos sin diferencias ni de ideología ni de credos, por eso Ud. va a tener la oportunidad al visitar nuestras instituciones en el país, de ver la permanente comunión entre las iglesias de la Arquidiócesis, con la colectividad y la sociedad toda. Que Dios lo proteja y bendiga, sembrando de éxitos su espiritual misión en el país”.

Tras las palabras, los presentes disfrutaron de un ágape con exquisiteces árabes típicas, y departieron durante la tarde entre fotos con el agasajado y querido Monseñor Santiago.