Charla con Monseñor Habib Chamieh

Sentado en el escritorio de la redacción, Monseñor Chamieh, se encuentra a la espera de la entrevista. Tras sus bendiciones y saludos a toda la colectividad sirio libanesa, solo falta encender el grabador.

-La semana pasada fue el día de San Marón, cuéntenos un poco sobre esta fecha…

Nosotros festejamos San Marón el día 6 de marzo, aunque en realidad la fecha original es el 9 de febrero, pero como generalmente la gente se encuentra vacacionando en esa fecha,normalmente celebramos San Marón el primer domingo de marzo. A nosotros nos llaman maronitas, nombre que deviene de este Santo. San Marón vivió como monje ermitaño en Siria. A sus seguidores los llamaron “seguidores de San Marón” quienes luego edificaron un monasterio en Siria que se llama “Casa de Marón” (en castellano), un monasterio que tenía mucha fuerza. Finalmente, cuando lo destruyeron, los maronitas emigraron al Líbano y allí ahora se encuentra el Patriarca como representante de la Iglesia Maronita y del pueblo maronita.

-Ya que mencionó al Patriarca, sabemos que recientemente emitió un mensaje sobre los refugiados y la situación actual del Líbano. Nos gustaría saber cuál es su reflexión  sobre el tema.

Viendo un poco todos los dichos últimamente sobre Medio Oriente, encontré una charla que hizo el patriarca maronita en Roma. La charla versaba sobre los cristianos en Medio Oriente por las persecuciones y hablo un poco de las causas y de algunas soluciones. Entre algunas de las causas que nombra son la fundación de la República islamita chiita en Irán, por lo que se desató luego el conflicto entre sunnitas y chiitas. Pero los involucrados en esto, quiero aclarar, son los “fanáticos extremistas” que no representan a los musulmanes moderados ni al Islam por sí mismo. El otro gran problema de Medio Oriente, que mencionó el patriarca, es el problema entre Israel y Palestina, lo que provocó que echaran a los palestinos de sus propias tierras y que la gran mayoría emigrara a Líbano, donde actualmente hay casi medio millón de palestinos refugiados. Asimismo, los israelíes tomaron posesión de terrenos de Siria, el Golán por ejemplo y de Líbano. Por lo que se resume que el mayor problema de Medio Oriente es este conflicto entre israelíes y los países árabes.

-Cuéntenos un poco sobre la campaña de caridad que están desarrollando en el país en nombre de la Iglesia Maronita para brindar ayuda a los refugiados.

Nosotros empezamos esta campaña a fin del año pasado para ayudar a los sirios que están en el Líbano. Luego con las vacaciones mermaron un poco las actividades, pero ahora retomaremos para avanzar con este tema y recaudar todo lo que necesiten estas personas. De esta forma también ayudamos a los libaneses que tienen que abastecer a casi un millón y medio de refugiados, lo que representa la mitad del país.  

-¿Considera que esa situación repercute en la colectividad libanesa de Buenos Aires?

Gracias a Dios, no. Esperemos que no haya problemas de ese estilo, porque lo que tenemos que lograr es la unión de las personas, no separarlas por intereses.

-Para terminar, ¿qué mensaje les puede dejar a todos los cristianos?

Las minorías de Medio Oriente están en camino a desaparecer con los extremistas fanáticos de ISIS, lo que significa un gran problema porque van a vaciar a Medio Oriente de toda su riqueza, cuando se trata de la tierra de las tres religiones más grandes del mundo y la cuna de la civilización. Por esto, nosotros, en nombre de la Iglesia Maronita de Argentina, pedimos a todas las confesiones que ayuden para que esta gente viva en condiciones dignas en sus propias tierras. Siempre pensamos en hacer algo más allá de los problemas que pueda haber. No queremos repetir lo que pasaron nuestros antepasados que tuvieron que vivir la tragedia de la inmigración durante el Imperio Otomano. Pero ayudar no significa enviar ropa o comida; Nosotros abrimos una cuenta en el Banco Nación que está en todo el país, para luego enviarlo al Líbano para la gente más necesitada. Todo aquel que quiera ayudar es bienvenido; es muy bueno ayudar a la gente que lo necesita.