últimas noticias
Cartas de lectores
martes, 18 de octubre de 2016

Séneca y Colón

Por Hugo Said Alume

Compartimos la carta enviada a la redacción por el Dr. Hugo Said Alume, donde reflexiona sobre el arribo de Cristobal Colón a América.

Leer las cartas a Lucilio de Séneca, ilustre sabio de la era cristiana, visionario de la vida, mentor de Nerón en sus primeros años fructíferos, es aleccionador. Séneca lamentará luego que a Nerón el desvarío lo lleve a la locura y la sinrazón, hasta condenarlo a muerte, que él anticipa para conservar la dignidad ante la muerte y evitar vejaciones. Sin embargo, el arco de triunfo de Nerón quedó indemne pese a que su destinatario ordenó quemar Roma. Tampoco a nadie se le ocurrió derribar el Coliseo, circo romano donde se arrojaba a los cristianos a los leones y los gladiadores luchaban hasta morir...

Vaya diferencia. En la era moderna, la monumental estatua de Colón fue derruida al atribuirse al homenajeado, desde una visión actual e ideologizada, una conducta aberrante, cuando en realidad contribuyó al hecho histórico que transformó el mundo para siempre. Sebastián Dozo Moreno acota que Fernando Colón dijo en su libro sobre su padre que el ilustre genovés cruzó el océano "ebrio de estrellas". Sería justicia emplazarlo al lado de Juana Azurduy como símbolo de ambos mundos, en un intento de pluralidad y racionalidad.

Noticias relacionadas

  • La Unión Argentina de Asociaciones de Ingenieros saluda a DSL en el Día del Periodista
    La Unión Argentina de Asociaciones de Ingenieros saluda a DSL en el Día del Periodista
  • Salutaciones a DSL en el Día del Periodista
    Salutaciones a DSL en el Día del Periodista
  • Salutaciones desde México
    Salutaciones desde México
  • La injusticia perenne
    La injusticia perenne
  • Papá y la Responsabilidad Social Empresaria
    Papá y la Responsabilidad Social Empresaria
Ver más
Seguinos en

Editorial

Caretas al viento: avalando el genocidio y el infanticidio

Las aberrantes declaraciones públicas, por parte de un alto directivo de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), no pueden más que suscitar nuestra supina condena y enérgico repudio. Grave es que haya quienes lo piensen, más grave aún es el desparpajo de expresarlo públicamente.

Ver más
Fachada