Régimen israelí bombardea aeropuertos internacionales de Damasco y Alepo

Se reportó este jueves, pasado el mediodía, una nueva agresión del régimen israelí contra Siria.

Las defensas aéreas sirias se encuentran en alerta máxima después de enfrentar dos agresiones israelíes simultáneas en los aeropuertos de Damasco y Alepo. Estos ataques aéreos producidos cerca de las 14, hora local, que dejaron daños significativos en las pistas de aterrizaje de ambos aeropuertos, han provocado una fuerte condena por parte del gobierno sirio.

Los daños en las pistas de aterrizaje han llevado al Ministerio de Transporte sirio a desviar los vuelos programados hacia el Aeropuerto Internacional de Lataquia. Las autoridades se han movilizado para evaluar y reparar los daños causados por la agresión israelí.

El Ministerio de Defensa sirio emitió un comunicado condenando la agresión israelí. "La agresión dañó las pistas de los aeropuertos de Damasco y Alepo y las dejó fuera de servicio", se lee en el comunicado.

"Este es un intento desesperado del criminal enemigo sionista de desviar la atención de sus crímenes en Gaza", agrega.

La declaración enmarcó este nuevo ataque como parte de una estrategia persistente del régimen de Israel para apoyar indirectamente a los terroristas presentes en territorio sirio (léase: cantón de Idleb), que sirve como una extensión en Siria de la agenda regional de Israel.

Previamente el miércoles circularon informaciones consignando que el martes por la tarde se lanzaron granadas de mortero desde Siria hacia el asentamiento "Ramat Magshimim" en el Golán Sirio ocupado. Dicho asentamiento israelí fue construido sobre las ruinas de la aldea palestina de al-Abasiyah.

En respuesta, las fuerzas de ocupación israelíes bombardearon los focos de fuego en territorios sirios, según los medios de comunicación israelíes.

Fuentes sirias informadas indicaron que la ocupación israelí bombardeó la zona de Wadi Jamla en el área rural occidental de la sureña provincia de Daraa, cerca del Golán.

Con el lanzamiento de la Operación Diluvio de Al-Aqsa por parte de la agrupación palestina Hamas, el Ministerio de Asuntos Exteriores sirio confirmó que las agrupaciones de la Resistencia Palestina han allanado el camino para lograr derechos palestinos no negociables.

Siria condenó “las prácticas brutales de la ocupación israelí contra el pueblo palestino”, enfatizando que “la respuesta de la Resistencia confirma el derecho del pueblo palestino a establecer su estado independiente en su tierra”.

Para Tel Aviv, Gaza no es suficiente

La República Árabe Siria ha apoyado durante mucho tiempo a la Resistencia Palestina y a su vez, desde el inicio de la guerra terrorista internacional impuesta contra Siria, el país ha sido un objetivo constante de los ataques aéreos y del lanzamiento de cohetes israelíes que han impactado infraestructuras civiles como aeropuertos y zonas residenciales.

Asimismo, la maquinaria bélica sionista también ha atacado implacablemente las baterías de la Defensa Aérea Siria en los últimos años en un intento de socavar las capacidades del Ejército Árabe Sirio, así como de fomentar el caos en Siria mediante el sustento de los extremistas de Idleb y a la vez sumar esfuerzos en desmedro de la reconstrucción nacional que procura llevar adelante el pueblo sirio y su liderazgo, mientras enfrentan también un cuadro de ocupación en parte del territorio nacional sumado a las criminales medidas de terrorismo económico impulsadas por Washington y sus socios de la OTAN.

Para el lector informado sobre la temática, no parece novedosa esta nueva agresión israelí, que se ha convertido en una constante de los últimos años, especialmente desde 2018 en que fue evidente la victoria del Estado Sirio frente a la estrategia bélica terrorista iniciada en 2011.

Pero lo que parece ser sorprendente es la descarada predisposición al caos y la destrucción del régimen fascista encabezado por Netanyahu, que sostiene su agresión contra Siria, aun en el presente marco de muerte y violencia que ha desatado contra Gaza.

Evidentemente, la avidez de caos, muerte y destrucción del régimen de Tel Aviv no parece tener límites.