Siria regresa a la Liga Árabe por la puerta grande
Tras recibir una cálida bienvenida y emitiendo un claro mensaje de unidad y acción regional conjunta, el presidente de la República Árabe Siria, Bashar al-Asad, participó este viernes de la 32ª Cumbre de la Liga de los Estados Árabes en Jeddah, Arabia Saudita.
La 32ª Cumbre de la Liga de los Estados Árabes, se llevó a cabo este viernes en la ciudad de Jeddah, Arabia Saudita. Tras concluirse la serie de reuniones bilaterales y la sesión general se adoptaron sus decisiones, expresadas en la declaración final (texto completo en este enlace ).
Durante la mañana, el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, dio la bienvenida a los líderes y funcionarios árabes, entre los que se incluyó el presidente de Siria, Bashar al-Asad, y el rey Abdullah II de Jordania.
Asimismo, también arribaron el viernes: el vicepresidente de los Emiratos Árabes Unidos, el sheikh Mansour bin Zayed Al Nahyan, el emir de Qatar, el sheikh Tamim bin Hamad Al Thani, el príncipe heredero de Kuwait, Mishal Al-Ahmad Al-Jaber Al-Sabah, el presidente de Yibuti, Ismail Omar Guelleh, el príncipe Rachid de Marruecos, el primer ministro de Irak, Mohammed Shiaa' al-Sudani y el primer ministro argelino Ayman Bin Abdurrahmane.
Otros funcionarios, incluido el presidente egipcio Abdel Fattah al-Sisi y líderes de Omán, Mauritania, Túnez, Bahrein, Líbano, Palestina y Yemen, llegaron a Jeddah el jueves.
El príncipe saudita dio la bienvenida a los líderes y funcionarios y posó para las fotos con cada uno antes de que los asistentes se reunieran para una foto grupal.
La 32ª Cumbre de la Liga Árabe comenzó poco después con el primer ministro argelino, Ayman Bin Abdurrahman, pronunciando las palabras de apertura antes de entregar la presidencia rotatoria de la Liga Árabe a Arabia Saudita, en manos del príncipe Mohammed bin Salman.
Cálida bienvenida al presidente de Siria
“Me gustaría dar la bienvenida a Siria de vuelta a su asiento entre sus hermanos”, dijo el primer ministro argelino, Ayman Bin Abdurrahman, en el discurso de apertura de la cumbre. Asimismo, expresó que es muy importante impulsar la solidaridad árabe para tener un papel árabe activo en los nuevos equilibrios internacionales. “El lema de la reunificación ha sido encarnado por el regreso de Siria a la Liga Árabe entre sus países hermanos”, dijo.
También dieron una cálida bienvenida y felicitaron la presencia de Siria a través de su presidente, todos los altos representantes presentes, entre ellos: el secretario general de la Liga Árabe, el rey de Jordania, el rey de Bahréin, el príncipe heredero de Kuwait, así como los presidentes de Egipto, Palestina, Mauritania, Djibouti, Somalía, el primer ministro de Irak y su homólogo del Líbano, el viceprimer ministro de Omán y el enviado especial del presidente del Consejo de Soberanía de Sudán.
El presidente tunecino, Kais bin Said dijo: “Damos gracias a Dios por el regreso de Siria a la Liga Árabe después de que se frustraran los complots destinados a dividirla”.
El Príncipe Heredero de Kuwait afirmó: “Rechazamos cualquier interferencia externa en los asuntos internos de Siria y afirmamos nuestra posición sobre la necesidad de preservar su soberanía e integridad territorial”.
Claro mensaje
Por su parte, el primer mandatario sirio pronunció un asertivo discurso en la cumbre (video aquí ). “Tenemos que buscar los grandes temas que representan una amenaza para nuestro futuro y producen nuestras crisis para no ahogarnos en abordar los resultados, en lugar de las razones”, dijo.
Asimismo, afirmó que los tópicos son demasiados para tratar, y las cumbres no son suficientes… “No comienzan con los crímenes de la entidad sionista, que es rechazada por los árabes, y no terminan con el peligro de la mentalidad expansionista otomana, y son inseparables del desafío del desarrollo como máxima prioridad para nuestras sociedades, aquí entra el papel de la Liga de los Estados Árabes como plataforma natural para discutir varios temas y abordarlos”.
“Estamos frente a una oportunidad histórica para reordenar nuestros asuntos con la menor intervención extranjera (posible)”, dijo el presidente. En ese marco subrayó que la acción árabe conjunta necesita visiones, estrategias y objetivos comunes.
El jefe de Estado sirio afirmó que espera “que la Cumbre sea un punto de partida para la acción árabe conjunta y la solidaridad entre los Estados árabes para lograr la paz, la prosperidad y el desarrollo en la región en lugar de la guerra y la destrucción”.
Agregó que las grietas que han surgido en la última década deben ser atendidas y lo más importante es dejar que cada pueblo maneje sus asuntos internos y evitar la injerencia externa en los asuntos de cada Estado.
El presidente Asad agradeció al Custodio de las Dos Mezquitas Sagradas y al príncipe heredero Mohammad bin Salman por el gran papel de Arabia Saudita y sus esfuerzos para impulsar la reconciliación en la región árabe y hacer de esta cumbre un éxito.
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