Cumbre Árabe emite Declaración de Argelia

En el marco del 31º período de sesiones del organismo regional, la Cumbre de la Liga Árabe en su segundo y último día de sesiones en el Palacio de Conferencias en Argel, emitió el miércoles su documento final denominado Declaración de Argelia.

En la reunión los jefes de los estados determinaron como asunto central la causa palestina y el apoyo a los derechos de ese pueblo, incluida su libre autodeterminación, así como el retorno y la compensación a los refugiados palestinos, de conformidad con la Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas Nº 194 del año 1948.

También afirmaron la adhesión a la Iniciativa de Paz Árabe de 2002 con todos sus elementos y prioridades, y su compromiso con una paz justa y amplia como opción estratégica para poner fin a la ocupación israelí de todas las tierras árabes, incluido el Golán sirio, y el territorio libanés Mazare Shebaa y Kafr Shuba, y resolver el conflicto con el régimen israelí sobre la base del principio de tierra por paz, el derecho internacional y las resoluciones internacionales pertinentes.

El comunicado subraya la necesidad de continuar los esfuerzos y acciones para proteger Jerusalén ocupada y sus lugares sagrados, y defenderla frente a los intentos rechazados y condenados de los ocupantes de cambiar su demografía, su identidad árabe islámica y cristiana, su patrimonio histórico y su status quo legal.

Asimismo, la Declaración exige el levantamiento del sitio israelí en Gaza y condena el uso de la fuerza "por parte de la autoridad de ocupación contra los palestinos y todas las prácticas barbáricas, incluidos los asesinatos, arrestos arbitrarios, así como exige la liberación de todos los prisioneros, especialmente los niños, las mujeres, los enfermos y los ancianos”.

La declaración enfatiza en el apoyo al Estado de Palestina para que obtenga la membresía plena en las Naciones Unidas, y exhorta a los países a que se sumen en ese sentido, para así “afianzar los esfuerzos legales destinados a mantener a la ocupación israelí como responsable de crímenes de guerra".

Además, resalta el apoyo de la cumbre a la política del grupo OPEP+, que incluye a los países productores de petróleo de dentro y fuera de la Organización en el mercado energético mundial. El 5 de octubre, la Organización anunció una reducción en la producción de petróleo en dos millones de barriles por día, para apoyar a los mercados en un momento en que enfrenta riesgos por una caída en la demanda de crudo.

Al mismo tiempo, el documento se refirió a "la necesidad de establecer una zona libre de armas nucleares y armas de destrucción masiva en el Medio Oriente".

La reunión también rechazó "todas las formas de injerencia extranjera en los asuntos internos de los países árabes, y la adhesión al principio de las soluciones árabes a los problemas árabes mediante el fortalecimiento del papel de la Liga en la prevención y resolución de crisis por medios pacíficos y trabajar para fortalecer las relaciones inter-árabes".

A su vez, el organismo renovó su "solidaridad con el Líbano para preservar su seguridad” y declaró el “apoyo a sus pasos para extender su soberanía sobre sus regiones terrestres y marítimas", y expresó su beneplácito ante "la revitalización de la vida constitucional en Irak, incluida la formación del gobierno."

Los participantes expresaron "plena solidaridad con el pueblo libio y apoyo a los esfuerzos destinados a poner fin a la crisis en Libia mediante una solución que preserve la unidad y soberanía de la nación, así como su seguridad y la de sus vecinos".

La declaración concluyó asegurando que: "Los Estados deben desempeñar un papel de liderazgo colectivo para contribuir a los esfuerzos por alcanzar una solución política a la crisis en Siria y abordar todas sus consecuencias políticas, de seguridad, humanitarias y económicas, de una manera que garantice la unidad y la soberanía y logre las aspiraciones de su pueblo".

El presidente argelino consideró que "esta cumbre constituyó un importante hito para fortalecer la solidaridad árabe". Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudita, Faisal bin Farhan, anunció que su país sería el anfitrión de la próxima Cumbre del organismo regional árabe.