Argelia celebró el 60º aniversario de la independencia

Argelia celebró el martes, los 60 años de independencia de las garras del colonialismo de Francia. Lo hizo con ceremonias en todo el país, el indulto de 14.000 prisioneros y su primer desfile militar en décadas.

La fecha marca la declaración oficial de independencia del país el 5 de julio de 1962, después de una brutal gesta de resistencia independentista de siete años que puso fin a 132 años de dominio colonial de París. La guerra, que dejó un saldo de alrededor de 1,5 millones de mártires argelinos, sigue siendo un punto de tensión en las relaciones entre Argelia y Francia.

Aviones de guerra de fabricación rusa volaron, vehículos blindados rodaron por el centro de Argel y los barcos de guerra estaban ataviados en el puerto de la ciudad. Las banderas argelinas ondearon en los edificios de todo el país y las canciones patrióticas resonaron en los altavoces.

“Un día de gloria para una nueva era” fue el lema oficial de la celebración, que incluyó conciertos, eventos deportivos, conferencias y exhibiciones fotográficas que rememoraron los horrores del colonialismo y la lucha patriótica argelina.

Si bien los presidentes anteriores abandonaron la celebración de desfiles militares, el presidente Abdelmadjid Tebboune revivió la tradición para este aniversario, por primera vez en 38 años.

El gran desfile , una demostración militar de fuerza, tuvo lugar en medio de crecientes tensiones entre Argelia y Marruecos por la disputada región del Sáhara Occidental, y con el resurgimiento de la amenaza de extremistas de corte al-Qaeda y DAESH en la región del Sahel, en el extremo sur de Argelia.

El mandatario inició la ceremonia depositando una ofrenda floral en el Monumento a los Mártires de la Revolución, e inauguró un monumento dedicado a los extranjeros que se sumaron a la lucha por la independencia de Argelia. Luego se montó en un vehículo militar y saludó a los representantes de las fuerzas armadas mientras saludaba a la multitud que coreaba: “¡Uno, dos, tres, viva Argelia!”.

El presidente palestino Mahmoud Abbas, el líder de Hamas Ismail Haniyeh y los presidentes de Túnez, Nigeria, Congo y Etiopía participaron en los eventos del aniversario del martes, de pie en una plataforma erigida frente a la Gran Mezquita de Argel.

Asimismo, con motivo del aniversario argelino, el ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Dr. Faisal Mekdad, viajó a Argel y sostuvo este miércoles un encuentro con su par argelino, Ramtane Lamamra.

Gran desfile e indultos

En su discurso inaugurando el desfile, el presidente Tebboune subrayó que el Ejército Nacional Popular, “digno heredero del Ejército de Liberación Nacional, constituye el escudo protector de Argelia”.

“En este gran y memorable día, y frente a esta impresionante manifestación de una Argelia orgullosa de sus glorias y fiel a sus mártires, felicito al valeroso pueblo argelino que otorga un carácter excepcional a la celebración del 60 aniversario de Independencia, en un momento en que se dibujan los contornos de una Argelia confiada en su futuro, con sus instituciones y órganos constitucionales”, expresó.

En el marco del aniversario patrio, el presidente firmó este lunes decretos anunciando el indulto para miles de presos, principalmente los condenados por delitos comunes que padecen enfermedades graves o que están inscritos para exámenes destinados a mejorar su educación.

El comunicado presidencial que anunció los indultos mencionó medidas en beneficio de “jóvenes procesados y detenidos por haber cometido actos de reunión y hechos conexos”.

La declaración presidencial también menciona un proyecto de ley en desarrollo que permitiría la liberación de activistas políticos o periodistas encarcelados, como resultado de las consultas de extensión del mandatario argelino en los últimos meses con varios actores políticos.

La agencia oficial APS dijo que la ley también afectaría a ciertas figuras argelinas en el exilio y a las personas encarceladas desde la "década negra" (1990), cuando las fuerzas de seguridad lucharon contra la insurgencia extremista en un duro conflicto.