Nueva denuncia de experto en DDHH de la ONU sobre violaciones israelíes contra palestinos

En un informe al Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, Michael Lynk, observador especial de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en el territorio palestino ocupado desde 1967, denunció el “un sistema político profundamente discriminatorio” que privilegia a 700.000 colonos en los territorios ocupados de Jerusalén Este y Cisjordania.

“Con los ojos de la comunidad internacional bien abiertos, Israel ha impuesto a Palestina una realidad de apartheid en un mundo posterior al apartheid”, escribió Lynk. “Se recomienda que la comunidad internacional acepte y adopte las conclusiones (...) de que Israel practica el apartheid en el territorio palestino ocupado y más allá”, agregó.

Asimismo, Lynk explicó que Israel se ajusta a la definición legal internacionalmente entendida del apartheid como un sistema de segregación racial institucionalizado practicado en Sudáfrica antes de su desmantelamiento a principios de la década de 1990. “Es un régimen político que de manera tan intencional y clara prioriza los derechos políticos, legales y sociales fundamentales de un grupo sobre otro, dentro de la misma unidad geográfica sobre la base de la identidad racial, nacional y étnica de uno”, afirmó.

Además, el académico canadiense dijo que el Estado de ocupación está siguiendo una estrategia de “fragmentación estratégica del territorio palestino en áreas separadas de control de la población, con Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este (al-Quds) divididas físicamente entre sí”.

“El sistema político de gobierno en el territorio palestino ocupado que otorga derechos, beneficios y privilegios sustanciales a un grupo étnico-nacional-racial mientras somete intencionalmente a otro grupo a vivir detrás de muros, puestos de control y bajo un gobierno militar permanente (…) satisface la evidencia para la existencia del apartheid”, añadió Lynk.

“Durante más de 40 años, el Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU han declarado en cientos de resoluciones que la anexión de los territorios ocupados por parte de Israel es ilegal, la construcción de cientos de asentamientos judíos es ilegal y su negación de la autodeterminación palestina viola el derecho internacional”, recordó, y sentenció: “Si la comunidad internacional realmente hubiera actuado de acuerdo con sus resoluciones hace 40 o 30 años, no estaríamos hablando de apartheid hoy”.

La comunidad internacional, afirmó, debería presentar una lista de medidas efectivas de rendición de cuentas para poner fin por completo a la ocupación israelí “y sus prácticas de apartheid” en las tierras palestinas ocupadas.

El pasado 1 de febrero, la organización de derechos humanos Amnistía Internacional reveló un informe de más de 200 páginas donde afirma que el régimen de Tel Aviv sostiene un estado de apartheid contra los palestinos, hecho considerado como un crimen de lesa humanidad.