Nakba, 75 años después: la continua lucha del pueblo palestino

Este 15 de mayo se conmemora el Día de la Nakba, que recuerda los trágicos eventos ocurridos entre 1948, cuando se llevaron a cabo asesinatos sistemáticos, limpieza étnica y el desplazamiento de cientos de miles de palestinos en manos de las bandas armadas sionistas, tras la ilegal implantación del régimen de Israel.

La Nakba, que significa "catástrofe" en árabe, hace referencia a la expulsión y desplazamiento de aproximadamente 750.000 palestinos de sus hogares, cuando los ocupantes sionistas declararon su usurpación de la tierra el 14 de mayo de 1948. Más de 500 aldeas palestinas fueron destruidas y la mayoría de los forzosamente desplazados se convirtieron en refugiados, imposibilitados de regresar a sus hogares.

Hoy, 75 años después de la catástrofe, el pueblo palestino sigue enfrentando numerosos desafíos.

La Franja de Gaza sigue sitiada, con severas restricciones de movimiento y acceso limitado a necesidades básicas, mientras en Cisjordania día a día la ocupación coloniza ilegalmente sus tierras. Los palestinos en su propia tierra son tratados como ciudadanos de segunda clase, enfrentando discriminación y marginación. La constante confiscación de tierras, demolición de viviendas y apropiación de mezquitas e iglesias, empeoran aún más su difícil situación.

Más de cinco millones de palestinos todavía viven en el exilio en todo el mundo, luchando por el retorno a su tierra desde países vecinos y hermanos como Siria, Jordania y Líbano, donde residen en campos de refugiados.

Las consecuencias de la Nakba siguen afectando a generaciones de palestinos en su tierra y en el exterior, perpetuando su lucha por la justicia, la autodeterminación y el derecho al retorno.