Manipulación mediatica israelí: Justificando un genocidio planificado

Buenos Aires, 12 de agosto de 2014: Han pasado 2 meses del inicio de la última agresión desproporcionada y genocida sobre Gaza -3 de junio- y poco mas de un mes del inicio oficial -8 de julio- tras bautismo al uso, con el indescriptible rótulo de ‘Margen Protector’ de eso que Israel hipócritamente llama ‘operación de defensa’.

A la fecha -y según lo planeado por los criminales perpetradores de la derecha mesiánica sionista- el nefasto saldo de víctimas civiles palestinas y su cotidiano dolor, acompañado de miles de voces en el mundo pidiendo frenar la flagrante limpieza étnica de la población árabe palestina de Gaza, merced a su prioridad humanitaria, parecen haber nublado una vez mas, la necesidad de análisis y búsqueda del inicial motivo de este triste capítulo.

Las versiones oficiales del sionismo hacia el mundo dieron forma a su excusa para iniciar esta nueva ‘operación oficial’, como una necesaria respuesta de seguridad a su población, cuya exposición al supuesto ‘terrorismo’ se había cristalizado previamente con la ‘ofensa’ sufrida por el caso de los tres adolescentes israelíes secuestrados y asesinados en Cisjordania.

Por supuesto, a los pergeniadores de ‘la excusa oficial’ poco les importaba que dicho evento hubiese disparado una furia de venganza en la sociedad israelí que por cierto, en manos de un grupo de sus derechistas mas extremos, inmediatamente cobró la vida de un inocente joven palestino de Jerusalen, Muhammad Husein Abu Khdeir, asesinado en un brutal crimen al ser quemado vivo.

Pero ante la oscuridad que parece querer velar las miradas del mundo sobre el maquiavélico manejo sionista de la información dentro y fuera de sus indefinidos límites y mientras aun las bombas siguen cayendo sobre Gaza a cada instante, es posible que la distancia y la libertad que nuestro amado suelo argentino nos brinda, nos permitan –más allá de la indignación supina – tratar de informarnos sobre los pormenores de la maquinaria de manejo informativo que ha orquestado el estado sionista dedicadamente durante años y que en este caso puntual merced a la multiplicación de los medios independientes, ha dejado ver ciertas grietas visibles en una nota proveniente de un importante medio masivo del stablishment norteamericano…

Quien hubiera pensado hasta hace pocos años - en épocas de la información centralizada y cien por ciento digitada por el sionismo y sus aliados en el imperio del norte – que en un medio como el New York Times podría servir alguna vez para mostrar ya no solo grietas, sino verdaderos cráteres en esta estructura mediática al servicio de la mentira.    

Compartamos esta nota del NYTimes de fecha 10 de julio pasado.

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Rumor y Fugas llenan un vacío mientras los silencios de Israel presionan sobre los asesinatos

2014 Julio 10

Funcionarios de inteligencia israelíes utilizaron ‘órdenes mordaza’ (prohibición judicial de difusión pública de un caso), en las últimas semanas para sofocar informes sobre las investigaciones iniciales tanto del secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes en Cisjordania así como del asesinato de aparente venganza de un adolescente palestino en Jerusalén Este.

Estas restricciones a la cobertura mediática de los acontecimientos en los territorios palestinos vienen más de cinco años después de que Israel bloqueara el trabajo de periodistas al informar sobre el bombardeo de Gaza bautizado por Israel como ‘Operación Plomo Fundido’ en 2008-2009. La actual guerra en ese territorio se lleva a cabo a la vista de los corresponsales extranjeros allí, como el columnista de Haaretz Anshel Pfeffer señaló.

En las últimas décadas, las restricciones a los medios de comunicación dotaron a los funcionarios de seguridad en Israel de manos libres para perseguir sus objetivos bajo la cobertura de un apagón informativo. Ahora, con el acceso a los medios sociales y los blogs de activistas, esto ya no es posible; y una vigorosa - a veces aterradora - discusión pública de los asesinatos ha continuado ‘on line’ basada en rumores y filtraciones utilizadas por los partidarios de ambas partes para acusar a sus enemigos.

En el caso de los tres estudiantes judíos que desaparecieron el mes pasado cerca de Hebrón, mientras hacían autostop a casa desde la escuela, el servicio de seguridad Shin Bet de Israel prohibió a los periodistas decirle al público que los disparos se escucharon en la llamada furtiva de emergencia hecha por uno de los adolescentes secuestrados. El periodista y comentarista israelí Noam Sheizaf argumentó que el mantenimiento de los hechos más destacados de la investigación en secreto durante semanas permitió una campaña de medios de comunicación social respaldada por el gobierno para canalizar la indignación por los secuestros ‘in crescendo’, así como para preparar al público para la gran decepción una vez que los cuerpos fueran descubiertos.

"En las escuelas de todo el país, incluyendo uno cerca de mi casa, signos colgaban de los adolescentes con nombres y lemas como: 'a la espera de su regreso' " N. Sheizaf escribió en su blog. "Si los profesores hubieran sabido de la sangre en el coche, los agujeros de bala y el sonido de los disparos, hubieran dejado que sus jóvenes estudiantes pintaran esos carteles y se sacaran fotos con ellos y las publicaran en Internet?"

Otro periodista israelí, Raviv Drucker, sugirió que ocultar los hechos al público podría haber construido una base de apoyo para la operación militar en Cisjordania contra agentes de Hamas durante la búsqueda de los adolescentes, así como también haber creado un ambiente de sed de sangre y convocatorias abiertas de venganza violenta, justo en los días previos a que un niño palestino en Jerusalén Este, fuera secuestrado y quemado hasta la muerte.

"Eso no quiere decir que la búsqueda de los niños debería haberse detenido, pero tal vez hubieran habido menos vigilias de oración en masa y discursos vacíos predicados sobre la creencia de que los niños estaban aún con vida", escribió Drucker. "Y tal vez habría habido menos presión de la opinión pública para una respuesta de mano dura de nuestros tomadores de decisiones. Tal vez, también, la ola de desagradable incitación hubiera sido un poco más pequeña".

La ausencia de información verificada sobre los desaparecidos israelíes inicialmente llevó a algunos palestinos a especular que "ningún secuestro había ocurrido nunca", según Amira Hass, corresponsal de Haaretz. La suposición generalizada de que los niños podrían ser hallados con vida, fomentado por las declaraciones de embajador de Israel ante las Naciones Unidas y otros funcionarios, también alimentó las especulaciones de que los niños podrían haber sido secuestrados como moneda de cambio para lograr la liberación de los presos políticos palestinos.

Drucker señaló que la continua supresión de información sobre la investigación policial del brutal asesinato de Muhammad Husein Abu Khdeir, el adolescente de 16 años arrebatado de una calle cerca de su casa en el este de Jerusalén la semana pasada, fue acompañada por una campaña evidente para desviar la culpa por empañar la reputación de la víctima. Informes de opaco origen sugirieron que el muchacho podría haber sido asesinado no por extremistas judíos, sino por su propia familia en un oscuro "crimen de honor".

A medida que la policía persiguió esta línea de investigación, la evidencia acerca de la naturaleza del delito y la posible identidad de los asesinos surgió gracias al esfuerzo de periodistas palestinos, activistas de Internet y la familia del muchacho, quien compartió imágenes de vigilancia de la cámara con corresponsales extranjeros que tienen más libertad para evadir ‘órdenes mordaza’ israelíes.

Bushra Abu Khdeir, una tía del muchacho, mostró a periodistas británicos un granulado vídeo, en blanco y negro del secuestro, registrado por una cámara de vigilancia.

Días después, el blogger palestino-estadounidense Ali Abunimah publicó imágenes más claras, grabadas con otra cámara de seguridad, que dijo parecía mostrar las caras de los secuestradores.

La Agencia de Noticias Palestina Watan también obtuvo y publicó un vídeo de hombres revisando la misma cámara de seguridad, el cual al parecer fue grabado justo antes del secuestro.

Los detalles de la investigación sobre la muerte de Muhammad son oficialmente secretos, incluso después de que un portavoz de la policía israelí anunció la detención de seis sospechosos y dijo que había una "fuerte posibilidad" de que el motivo del asesinato de la adolescente palestino era "nacionalista", lo que indica que fue un ataque de venganza por derechistas extremistas judíos.

Cuando un oficial de policía israelí acordó informar a Sheera Frenkel de Buzzfeed sobre la investigación que revela que los sospechosos eran racistas, fanáticos ‘barrabravas’ del club de fútbol Beitar Jerusalén, él insistió en el anonimato debido a la orden de silencio.

Esa fuga de la policía ha encendido la discusión pública de si los fanáticos del fútbol anti-árabes del club Jerusalén son la corporización de un tribalismo oscuro intrínseco a todo nacionalismo extremo o simplemente fanáticos trastornados cuya violencia no está relacionada con el conflicto palestino-israelí.

Mientras el debate continúa, los periodistas israelíes como el Sr. Sheizaf dicen que los funcionarios de seguridad del país deben ser desafiados más cuando buscan el permiso legal para acallar a los medios de comunicación.

"Mi única esperanza es que los jueces de distrito que aprueban las ‘órdenes mordaza’ sin dudarlo – sean estas las detenciones en régimen de incomunicación, los detalles de una investigación o de un hecho que podría avergonzar al jefe de personal – lleguen a aprender de todo este incidente", escribió. "Espero que en el futuro, los periodistas locales y extranjeros piensen dos veces acerca de la manera en que sirven a los intereses de quienes detentan el poder, en lugar de los intereses de sus propios lectores."