Nuevo récord de contagios de coronavirus en Líbano

El número de nuevos contagios de COVID-19 en el Líbano aumentó considerablemente este domingo, con 166 casos positivos, culminando el fin de semana con las cifras más altas desde la llegada del brote al país, elevando el número total de casos a 2334.

La gran mayoría de los casos este domingo se detectaron en residentes locales, de los cuales 131 provienen de empleados de una empresa de limpieza en Roumieh, quienes fueron trasladados por la Cruz Roja a un lugar de cuarentena en Karantina. En el campamento de refugiados de Rashidiya, al sur de Tiro, se detectaron siete casos luego de la realización de 70 testeos aleatorios por las autoridades del lugar.

La noticia confirmó las advertencias del ministro de Salud, Hamad Hasan, quien más temprano en el día aseguró que la cantidad de infectados durante este domingo sería “la más alta". Sin embargo, envió tranquilidad a los ciudadanos afirmando que “se conoce la fuente de todas estas infecciones”.

Por su parte, con el Líbano frente a una nueva ola del virus, Firas Abiad, el jefe del Hospital Universitario Rafik Hariri, donde se tratan la mayoría de los casos de COVID-19, compartió vía Twitter algunos consejos a la ciudadanía sobre “cómo proceder de ahora en más”.

"Gestionar situaciones de contacto: las máscaras faciales reducen enormemente la propagación, pero hay que usarla antes de pedirle a los demás que lo hagan", escribió. “Mantener distancia, cuanto más mejor. Limite la duración de las charlas tanto como sea posible. Lavarse las manos es imprescindible”, afirmó.

"No podemos permitirnos que el coronavirus se desate drásticamente en este país, porque nuestras capacidades son bajas", dijo Abiad.

En una entrevista televisiva,el jefe médico señaló que los recientes cortes de energía "casi paralizaron la industria de la salud en el Líbano". El hospital Rafik Hariri, la instalación de salud pública más grande del Líbano con 430 camas y 10 quirófanos, tuvo que hacer frente a interrupciones diarias durante más de 18 horas.

“Cuando tienes cortes severos de la red eléctrica, entonces tienes que recurrir a tus generadores. Pero sin combustible, esos generadores no pueden funcionar normalmente, y sin generadores, un hospital simplemente no puede funcionar. Es por eso que tuvimos que reducir el consumo de combustible para poder seguir en pie", dijo.

Del 2 al 7 de julio, el hospital apagó el aire acondicionado para el personal administrativo, pero no para los pacientes. También cerró dos de sus quirófanos y pospuso cirugías no urgentes. El importador de combustible Total Liban donó diesel para los generadores del hospital la semana pasada, pero Abiad aseguró que la situación “está lejos de ser estable”.

Abiad agregó que los hospitales públicos "están viendo un aumento de pacientes fuera de la pandemia del coronavirus". Esto se debe a que cientos de miles de personas han perdido sus trabajos en los últimos meses, lo que les quita su seguro de salud privado y la cobertura de seguridad nacional. 

Mientras tanto, se espera que el fuerte aumento de los casos provoque nuevos llamados a la reimposición de medidas para combatir la propagación del virus. Este domingo, el municipio de Nabatiyeh anunció en un comunicado que cerrará el mercado de la ciudad a partir de este lunes.

"Según las condiciones de salud actuales que experimenta nuestra región, cancelaremos el mercado desde mañana", dijo. El documento enfatizó la importancia de evitar las reuniones, "especialmente las fiestas y las reuniones al aire libre".