Líbano impone nuevas medidas contra el COVID-19
Los casos diarios de coronavirus en el Líbano han aumentado considerablemente y las autoridades han anunciado un nuevo período de aislamiento para enfrentar la pandemia.
Los números de contagios por día de COVID-19 en la República Libanesa ha aumentado dramáticamente en los últimas semanas y encendieron las alarmas del gobierno. Luego de atravesar una semana con más de 100 casos diarios, con 132 nuevos casos registrados este lunes, el Gabinete anunció nuevas medidas para controlar esta nueva ola de contagios
Según las estadísticas del Ministerio de Salud libanés, el 25 de julio, Líbano registró 168 nuevos casos confirmados de coronavirus, y al día siguiente, llegó al récord de 175 infectados. Estas cifras constituyen un aumento significativo desde el comienzo del mes. Cabe recordar que el 1 de julio, Líbano sólo registró ocho nuevos casos.
Después de una reunión del Gabinete, el ministro del Interior, Mohammed Fahmi, informó que los sectores no esenciales estarán cerrados desde el martes hasta el 10 de agosto, incluyendo clubes nocturnos, actividades deportivas, salones de eventos, centros de juego, mercados populares, parques infantiles interiores y exteriores, parques públicos, paseos marítimos, playas públicas, ceremonias religiosas, sesiones de entrenamiento grupal en gimnasios, conciertos, lugares de culto, teatros y cines.
Asimismo, se impondrá un bloqueo general que involucrará a todas las instituciones y empresas privadas, los mercados y los sectores educativos y bancario, desde este 30 de julio al 3 de agosto y del 6 al 10 de agosto. Los restaurantes, cafeterías y vehículos de transporte público estarán obligados a operar con el 50% de la capacidad de sus clientes.
"Todas las reuniones están prohibidas", dijo Fahmi, y agregó que los sectores de salud, alimentación, seguridad, militar, farmacéutico, industrial, agrícola y mediático, además de las instituciones públicas y puertos de entrada marítimos, terrestres y aéreos estarán exentos de estas medidas de cierre.
Con un total de 3879 contagios, el número de hospitalizaciones por coronavirus aumentó en un 60 por ciento entre el 12 y el 26 de julio, mientras que el número de personas en cuidados intensivos también sufrió un incremento del 65 por ciento durante el mismo período.
Desde la llegada del virus al país mediterráneo, Líbano recibió elogios por su manejo de la pandemia y tuvo menos casos que otros países de Medio Oriente. Sin embargo, ha estado levantando y volviendo a imponer restricciones relacionadas con el virus en las últimas semanas, lo que podría generar un rebrote de contagios en las calles.
A pesar de que el Aeropuerto Internacional de Beirut reabrió a turistas el 1 de julio, el ministro de Salud, Hamad Hasan, informó hoy que después del 31 de este mes, los viajeros no podrán ingresar al Líbano sin pruebas de anticuerpos. "Desafortunadamente, enfrentamos un giro peligroso y arriesgado con respecto al coronavirus", dijo Hasan.
El ministro agregó que los viajeros procedentes de países con altas tasas de infección tendrán que someterse a una cuarentena obligatoria en hoteles designados entre 24 y 48 horas hasta que se emitan los resultados de la pruebas.
Finalmente, se informó que el Gabinete se reunirá este martes para aprobar más medidas preventivas “estrictas” en un intento por detener el aumento de las infecciones.
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