Región rechaza referéndum kurdo

El Parlamento de Irak votó este martes en contra de la celebración del referendo sobre la independencia previsto el 25 de setiembre en el Kurdistán iraquí, consulta que podría tener importantes consecuencias en la región.

Masud Barzani, presidente de la región iraquí del Kurdistán, explicó que el referéndum no es una “decisión personal”, sino que depende del pueblo y de las fuerzas políticas kurdas. Señaló que “el pueblo kurdo garantiza su derecho (a la autodeterminación) a través de medios pacíficos, del diálogo y las negociaciones ”.

Esta decisión se produce cuando el parlamento de Kurdistán –que no se reunía desde hace dos años-  anunció que lo hará este jueves para votar en favor del referendo que fue anunciado en junio por Barzani.

Los propios 5,5 millones de kurdos iraquíes están divididos sobre esta consulta popular. Todos quieren un Estado kurdo , pero algunos están en desacuerdo con la fecha elegida por el actual presidente de la región autónoma.

El jefe del Parlamento iraquí, Salim Al Juburi, estimó que el gobierno trata de mantener “la unidad del territorio y del pueblo iraquí ”. Esta votación “impone al primer ministro tomar todas las medidas para proteger la unidad de Irak y entablar un diálogo serio” con las autoridades de la región autónoma del Kurdistán, aseguró.

El rechazo iraquí fue replicado por la Liga Árabe, organismo que aprobó una resolución donde denuncia el referéndum por la independencia kurda como un desafío a la soberanía iraquí. La resolución es una nueva medida tomada por el organismo luego de que su secretario general, el egipcio Ahmed Abulgeit, viajara a Irak para intentar detener el referéndum.

Durante su visita a Irak, Abulgueit pidió a Barzani posponer la votación, sobre todo debido a “los grandes desafíos a los que se enfrenta el pueblo iraquí en la próxima etapa, en primer lugar, la amenaza terrorista del grupo Estado Islámico”, según el portavoz de la Liga Árabe.

La convocatoria de la consulta popular, aunque no vinculante, ha suscitado la oposición de Washington, de varios países europeos y sobre todo de Turquía y de Irán por miedo de que atice las demandas separatistas de sus propias minorías kurdas.

Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía instó en un comunicado oficial a las autoridades del Kurdistán iraquí a renunciar al referéndum independentista y alertó que, en caso contrario, los kurdos deberán pagar “un precio” alto por esa iniciativa.

En frente, Israel apoya la celebración del referéndum. “Mientras Israel se opone al terror en cualquier parte, apoya los legítimos esfuerzos del pueblo kurdo para lograr un Estado propio”, declaró el primer ministro, Benjamín Netayahu .